¿Vuelves a coger tu moto? Estas son las averías más comunes a las que deberías estar atento

Es habitual entre los usuarios de moto el aparcarla en invierno, ya que con las bajas temperaturas estos vehículos son más incómodos de conducir, y volver a sacarla cuando llega la primavera y el buen tiempo. Obviamente, al dejar la moto parada durante esta temporada, deberemos asegurarnos de que todos los componentes funcionan correctamente antes de volver a usarla. 

Pablo Carceller, CMO y cofundador de Momoven, explica que hay varios tipos de averías que suelen ser comunes en las motos. Para evitar que se conviertan en problemas graves, deberemos ser capaces de identificar los síntomas de cada uno de estos fallos para poder actuar cuando sea necesario. 

Cómo detectar los fallos de batería en la moto

Si al intentar arrancar la moto, el motor gira lentamente o no hace ningún movimiento ni sonido en absoluto, probablemente haya un problema en la batería. Será indicativo, igualmente, que las luces u otros componentes eléctricos no se enciendan. 

Para hacer una prueba de la batería hay que utilizar un tester o multímetro. Si la batería está cargada, pero sigue habiendo problemas de arranque o encendido, Carceller explica que posiblemente esté defectuosa y que sea necesario reemplazarla.

Cómo revisar los neumáticos de la moto

Se puede detectar el desgaste de los neumáticos a simple vista gracias a los testigos o indicadores, que deben estar bajo la superficie del dibujo. Si el testigo ya está a la misma altura del dibujo, significa que el desgaste es excesivo y hay que reemplazar el neumático.

Otro síntoma de desgaste o de pinchazo es la pérdida de presión o la inestabilidad en la conducción. Para hacer una prueba de presión de los neumáticos, se utiliza un medidor de presión o manómetro. Carceller apunta que si cada dos o tres días la presión baja, el neumático estará pinchado. 

Para detectar dónde se encuentra exactamente el pinchazo si lo hay, podemos poner en práctica un truco casero: recubriremos la rueda de agua y jabón y, donde esté el pinchazo, se formarán burbujas debido al aire que saldrá del neumático. 

Detectar problemas en el sistema de frenado de la moto

El primer y más evidente síntoma es la disminución de la capacidad o eficiencia del frenado de la moto. El segundo, ruidos anormales al accionar los frenos, y la tercera, el aumento de distancia de frenado o la sensación de falta de respuesta de la maneta de freno.

Para realizar una prueba de efectividad y salud del sistema de frenado lo primero es hacer una inspección visual. Lo principal a revisar es el grosor y espesor de las pastillas de freno: si están desgastadas o rotas, será necesario reemplazarlas.

Lo segundo es revisar el nivel del líquido de frenos y ver si está en niveles normales, si el color está bien (no oscuro o contaminado) y si hay presencia de alguna fuga del líquido. Lo ideal es llevar la moto a un taller.

Problemas en la cadena y kit de transmisión de la moto

Lo primero que hay que hacer es una inspección visual, ya que un desgaste excesivo de la cadena puede ser evidente a la vista, como un estiramiento exagerado de la cadena o desgaste en los eslabones. Igualmente, los ruidos y vibraciones anormales que se puedan notar mientras se conduce la moto también serán señales de desgaste.

También será un problema una cadena con signos de rotura, como eslabones sueltos o ausentes. Un mal funcionamiento de la transmisión se podrá detectar, por otro lado, si la moto tiene dificultades para cambiar de marcha o si se experimentan cambios bruscos en la aceleración.