Movilidad

Seis situaciones de riesgo en rotondas: ¿sabrías cómo reaccionar en todas?

Los ciclistas siempre tienen prioridad en las rotondas.
Steven Vance

Las rotondas siguen dando de qué hablar. No todos los conductores saben circular correctamente por ellas y es fácil acabar provocando algún accidente o sufriendo algún choque. Tanto por el uso de los intermitentes, como por el de los carriles como por encontrarnos con situaciones de riesgo en las que no sabemos cómo reaccionar, la DGT recuerda todos los años cómo salir del paso en este tipo de intersecciones. 

Tráfico identifica seis situaciones de riesgo o peligro en las rotondas o glorietas y explica cómo hay que actuar en cada una de ellas para conducir correctamente y evitar accidentes o sustos.

¿Puedo usar el carril derecho?

Hay veces que encontramos el carril derecho muy congestionado y decidimos entrar el por el izquierdo (si hay más de uno). Este gesto no puede aplicarse en el caso de que el tráfico fuera fluido, pero se hace la excepción cuando hay muchos vehículos. Solo se podrá usar el carril izquierdo para entrar en la rotonda si vamos a tomar una de las últimas salidas, para tener tiempo y cambiarnos de carril.

¡Ojo, ciclistas!

Cuando estamos esperando para entrar en una glorieta y el primer ciclista de un pelotón está ya dentro del trazado habrá que dejar pasar a todo el grupo, ya que actúan como un único vehículo y tienen la prioridad. 

¿Cambia la prioridad si hay un semáforo?

En las rotondas en las que hay una señal o un semáforo cambia la prioridad. Si la señal vertical da la prioridad a los vehículos que entran, los que estén ya circulando tendrán que respetarlos.

Carril de salida bloqueado

Normalmente hay que tomar el carril exterior para poder salir de una rotonda pero ¿qué pasa si está bloqueado? Pues que, en el caso de que una señal lo permita, los coches podrán salir desde el carril interior señalizando sus movimientos con antelación.

Camiones y rotondas

Si nos encontramos con un vehículo de grandes dimensiones a nuestra par o delante, habrá que cederle el espacio necesario para que maniobre, ya que puede llegar a ocupar nuestro carril y golpearnos si no le dejamos espacio suficiente.

¿Y si no veo?

Si tenemos al lado un vehículo grande que nos impide ver correctamente la entrada a la glorieta, habrá que esperar a que podamos ver para acceder a la rotonda con seguridad.

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