Desconvocan los actos para celebrar la paz en el País Vasco ante la falta de consenso

El consejero vasco de Interior, Rodolfo Ares, ha anunciado que, finalmente, no se celebrarán las concentraciones silenciosas ante los ayuntamientos con las que el lehendakari, Patxi López, pretendían convocar a la ciudadanía vasca para que pudiera "expresar su alegría por el fin de ETA", debido a la "falta de consenso y acuerdo" que se ha dado tras la decisión del PNV de no participar ante la negativa de Bildu de estar presente como coalición.

En declaraciones a los medios de comunicación durante el pleno que se está celebrando este jueves en el Parlamento vasco, Ares ha explicado que esta iniciativa surgió de la reunión mantenida dentro de la ronda de contactos entre el lehendakari, Patxi López, y el presiente del PNV, Iñigo Urkullu. Sin embargo, ha criticado que "en el ultimo momento" los jeltzales han decidido no participar "ante la negativa de Bildu" a acudir a las concentraciones como coalición, aunque dejaba abierta la participación a sus miembros. "El PNV está permanentemente mirando de reojo a Bildu", ha denunciado.

Por ello, ha defendido que López, asumiendo su responsabilidad, ha tomado la decisión de no convocar a la sociedad vasca a las puertas de los ayuntamientos para que "exprese su alegría por el final de ETA", porque cree que esto debe hacerse "desde el máximo consenso de todos aquellos que a lo largo de todos estos años hemos caminado juntos para reclamar el fin de ETA". "Prácticamente la totalidad de los representantes sociales, sindicatos y partidos políticos teníamos buena predisposición para abordar esta convocatoria de forma unitaria", ha reiterado.

La falta de consenso también ha impedido la aprobación de una declaración institucional en la que se valore el anuncio del cese definitivo de violencia por parte de ETA. Todos los partidos salvo UPyD han estado de acuerdo en un texto de dos puntos en el que se califica de positivo el paso dado por la organización terrorista ETA de anunciar el cese definitivo de su actividad.

Sin embargo, al no sumarse al documento todos los grupos, la iniciativa no ha salido adelante como declaración institucional sino como declaración de Presidencia y ha sido leída por la presidenta de la Cámara de Vitoria, Arantza Quiroga, al final del pleno. En un segundo punto se reconoce que la perseverancia de la sociedad vasca que, por unanimidad ha exigido la desaparición de ETA y el respeto de los derechos humanos, ha sido un elemento muy importante para lograrlo.

Al término del pleno, el parlamentario de UPyD, Gorka Maneiro, ha explicado en los pasillos de la Cámara que no se ha sumado al texto porque a su juicio se queda "muy corto" y ha dicho que ha echado en falta que no se precise que ETA no ha desaparecido y que hay que exigir su disolución. Ha lamentado que el resto de grupos no haya considerado necesario incluir en el texto un párrafo referido a esa cuestión y ha aclarado que sí que celebra "la apertura de un tiempo de esperanza" pero ha dicho que se debería haber añadido una exigencia a ETA de "su disolución incondicional y para siempre", así como "la entrega de las armas y arsenales".

Ha lamentado que en el año 2011 el Parlamento Vasco no haya podido incorporar estas cuestiones en una declaración y ha recordado que en el texto tampoco se incluye una petición de un final de ETA "con vencedores y vencidos", y en el que se reconozca la labor que han jugado las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.