La decisión del Ministerio de Cultura de crear un Premio Nacional a la tauromaquia ha generado sorpresa y numerosas protestas entre los grupos antitaurinos. Estos no entienden la razón por la que, en un momento en el que las subvenciones de la Administración a los toros han disminuido e, incluso, algunas comunidades como la catalana han prohibido las corridas, el ministerio presidido por Ángeles González-Sinde laureará lo que consideran "maltrato y tortura animal".

Esta es, al menos, la opinión del Partido Animalista PACMA, que este miércoles presentó un recurso contencioso administrativo ante la Audiencia Nacional contra la celebración de este galardón, valorado en 30.000 euros.

Para Silvia Baquero, candidata por Madrid al Congreso por PACMA, el recurso está fundamentado porque el premio "no responde a un interés público" y la disciplina que homenajea provoca "rechazo social". Asimismo, el grupo recuerda en un comunicado que la Unión Europea ha advertido hasta en tres ocasiones a España que incumple la legislación en materia de protección animal en distintas áreas.

El pasado 8 de noviembre se hacía oficial el traspaso de competencias sobre los toros del Ministerio del Interior, al Ministerio de Cultura. De esta forma, la tauromaquia pasaba a ser considerada como una disciplina artística y un producto cultural, lo que implicaba que se convertía en una actividad digna de "protección" y de "fomento" mediante instrumentos como, por ejemplo, premios.

Según lo dispuesto en el BOE, el nuevo Premio Nacional de Tauromaquia tiene previsto reconocer anualmente los méritos extraordinarios de un profesional del toreo -ya sea torero, ganadero o empresario- o de una persona o institución que destaque por su labor de difusión de los valores culturales de la tauromaquia. Su dotación económica asciende a 30.000 euros, la segunda más alta de los premios que concede Cultura, solo por detrás del Premio Nacional de las Letras Españolas, de 40.000 euros, y por delante de de Literatura, Historia de España, Cómic, Ilustración o Periodismo Cultural, con 20.000 euros.

"González-Sinde está completamente decidida a apoyar los toros", explica Baquero, quien interpreta que los últimos pasos dados por Cultura están dirigidos a "blindar constitucionalmente" la actividad. "El traspaso de Interior a Cultura conlleva incluso beneficios fiscales, porque al comenzar a considerar la tauromaquia como un hecho cultural, su IVA se reduce hasta 10 puntos".

La ministra de Cultura ha revelado en anteriores ocasiones su afición a los toros y hace un año, después de que Cataluña prohibiera las corridas, defendió públicamente la "vigencia" de la actividad taurina.

Pese a que el Ministerio parece dispuesto a proteger y promocionar la vigencia de la tauromaquia, las subvenciones que proporciona la Administración a la actividad han disminuido en los últimos años. En 2007, un informe estimaba que los toros recibían ayudas públicas de unos 564 millones de euros. Hoy en día, los datos revelan que algunas comunidades, como la madrileña y la andaluza, han reducido considerablemente esta cantidad.

En 2010 la Comunidad de Madrid proporcionó 375.000 euros a peñas y ayuntamientos para "potenciar la fiesta", mientras que en 2009 la cantidad superaba los 600.000. Según el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid del 19 de octubre de 2011, las ayudas del Gobierno autonómico para este año supondrán unos 370.000 euros que se distribuirán entre los municipios que celebren actividades taurinas (el grueso de la dotación), escuelas taurinas (44.980 euros) y asociaciones sin ánimo de lucro que apoyen la tauromaquia como peñas y fundaciones.

El presupuesto de la Comunidad Autónoma Andaluza para el programa de espectáculos públicos y juego de 2010 contemplaba ayudas en materia taurina valoradas en 981.136 euros, que fueron destinados a subvenciones a la Asociación Andaluza de Escuelas de Tauromaquia Pedro Romero (267.000 euros), a la Fundación Andaluza de Tauromaquia (35.000) y a infraestructuras y equipos (679.136). Un año antes, la misma administración gastaba un presupuesto aproximado de 1.255.000 euros en promoción de los toros, es decir, casi un 22% más, según información recogida por la asociación andaluza Asanda.

El partido PACMA advierte de que conocer el dato exacto de las subvenciones que se destinan a la tauromaquia en España no es sencillo, ya que estas no son exclusivas de las Comunidades Autónomas, sino que también pueden ser concedidas por los Ayuntamientos e, incluso, por la Unión Europea, según denunció el año pasado el BNG y el diario alemán Taz. Según el segundo, algunas subvenciones europeas dirigidas a la ganadería española terminaban beneficiando al desarrollo del negocio de los toros de lidia.