El jefe de los Mossos d'Esquadra lamenta los intentos de politizar los cuerpos de seguridad

El director de los Mossos d'Esquadra, Manel Prat, considera que la renuncia a la escolta por parte de la líder del PPC, Alícia Sánchez-Camacho, por su presunta relación con el director de la agencia de detectives Método 3, es un "intento burdo y chapucero de politizar los cuerpos de seguridad".

"Todos los cuerpos de seguridad, tanto los Mossos d'Esquadra, como la Guardia Civil y la Policía Nacional, tienen magníficos profesionales que lo último que desean es verse implicados en este tipo de disputas institucionales", ha agregado este lunes en una rueda de prensa, tras atender a determinados medios.

Prat ha admitido que el 18 de febrero, cuando fueron detenidos el director y tres empleados de Método 3, se reunió con Mayka Navarro, una periodista de El periódico de Catalunya. "Subió a mi coche y tuvimos una conversación de entre 15 y 20 minutos mientras ella aprovechó para comer" mientras hablaban de algunas informaciones que había publicado.

El vehículo oficial, que salió de la comisaría de Les Corts y se dirigía a la Conselleria de Interior, recogió a Navarro en la confluencia de Consell de Cent con la Rambla de Catalunya, y no en la esquina de las calles Aribau y Provença, es decir, a 1,5 quilómetros de lo que se había dicho. En ningún caso, ha añadido, estuvo aparcado delante de la agencia de detectives ese día.

"En otras ocasiones sí, porque he ido a comer a la Carmaga como tantos otros políticos y ciudadanos. Afortunadamente, ese día no, porque hubiera sido una coincidencia absolutamente rocambolesca", ha ironizado el director de la policía catalana, cuya dimisión ha reclamado Sánchez-Camacho, una opción que Prat ha descartado categóricamente.

De hecho, "no sé qué edificio es, no conozco al director y los Mossos d'Esquadra no tienen ningún relación con Metodo 3",  ha afirmado Prat, quien ha negado cualquier implicación con los casos de espionaje y quien desconocía la entrevista mantenida entre Navarro y el director de la agencia ese mismo día.

En su opinión, el encuentro ha sido "totalmente descontextualizado"  pues es "habitual" que se entreviste, almuerce y hable por teléfono con periodistas. Además, ha criticado la "tergiversación política" y los intentos de desprestigiar la labor de los Mossos d'Esquadra acusándolo, "desde hace tiempo", de ser un cuerpo policial politizado. Este es "el principal ataque a una estructura de autogobierno".

En cualquier caso, se reunirá con el conseller de Interior, Ramon Espadaler, para decidir qué pasos hay que tomar (no descarta emprender acciones judiciales contra la líder popular a quien ha acusado de "faltar a la verdad") y espera las explicaciones del ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, quien este martes comparecerá en el Congreso de los Diputados.

Precisamente, el director de los Mossos ha revelado que el Ministerio pidió hace tres semanas el cambio de escolta personal para Sánchez-Camacho y no el sábado, cuando la dirigente popular renunció a la protección de los Mossos al trascender un informe policial que situaba el coche de Prat en las inmediaciones de la agencia, donde recogió a una periodista que se había reunido con el director de Método 3, Francisco Marco.