Eduard Punset: La gente tiene una capacidad infinita para ser infeliz"

Se siente gran soledad, igual que la gente. El escándalo de la tele de hoy no radica en que tanta gente vea programas que no son formativos, yo creo que hay que satisfacer esta demanda de entretenimiento. El problema es que las personas que quieren otro tipo de espacios no los pueden ver porque no los hay.

Pero Redes está en forma...

Una de las razones por las que ha durado tanto tiempo es por su horario. Está en una franja en la que no molestamos a casi nadie. Si ocupásemos otros horarios, sería muy diferente.

¿Es como los documentales de La 2, que todo el mundo dice verlos y luego las audiencias no les corresponden?

A mí me preocupa respetar el share de la cadena. En este aspecto, Redes no ha depredado los datos de La 2. Hemos ayudado a mantenerlos.

Lleva más de diez años con el programa. ¿Cómo le surgió la idea?

Había un desencanto con las soluciones ideológicas a los problemas personales. Sólo el conocimiento científico es capaz de darnos pautas para entender cómo somos.

¿Qué pasó con El primero de la clase?

Aunque ahora se quieran olvidar de él, ese espacio fue una maravillosa idea de TVE. Estamos en un país en el que aún no sabemos mezclar el rigor educativo con el entretenimiento.

Su último libro explica cómo funciona el cerebro humano. ¿Cómo lo hace el de Eduard Punset?

Igual que el del resto. Tal vez yo sea más consciente que otros de la necesidad de olvidar, de desaprender. La gente tiene una capacidad infinita para ser infeliz. Nadie nos enseña a desaprender las cosas que no tienen sentido.

¿Por ejemplo?

Las emociones no son importantes. Cuando entendamos eso, la vida será más fácil.

¿Echa de menos la política?

A mí me gustan las novedades y, en general, el mundo político es muy parsimonioso. Ahora, las novedades que afectan a las personas están en la ciencia.

* La 2. Domingos, a las 00.35 horas.