Imágenes reales para denunciar los daños físicos que provocan los instrumentos usados por los gobiernos para proteger sus fronteras. Vallados es la exposición de fotografías que este jueves día 30 se inaugura en el Ateneo de Madrid y que según su autor, el fotógrafo Luis Gaspar, servirá para concienciar a la sociedad de que la seguridad no se consigue nunca a costa de las heridas de personas inocentes.
"La idea", cuenta Gaspar, "surgió de casualidad". El artista se hizo con una concertina y comenzó a hacer fotos, la primera hace ya cinco meses. Con el paso de los días, "se corrió la voz entre amigos" y al final han sido 102 personas –gente de la cultura, el espectáculo o la comunicación– las que aceptaron posar rasgándose la piel para su cámara. "El que no se ha roto la camisa se ha hecho una herida en el brazo o el cuello", relata.
La exposición, que cuenta con instantáneas de rostros tan conocidos como el director de cine Fernando León de Aranoa, la periodista Susanna Griso el escritor Maxim Huerta, quiere servir de aldabonazo contra "un error que han cometido [el uso de concertinas para proteger la frontera de Ceuta y Melilla] este Gobierno y el anterior, y que espero que no vuelva a suceder", argumenta Gaspar a 20minutos.es.
Vallados, que se podrá visitar por las tarde (de 18 a 22 h.) en el Ateneo hasta el 30 de marzo, surgió por azar, improvisadamente, pero llega justo en un momento en el que la opinión pública está inmersa en un proceso de concienciación sobre los instrumentos que el Estado usa para impedir que los inmigrantes penetren en Europa. Las heridas causadas a propósito en la piel y la ropa de personas famosas no son las profundas heridas que la necesidad provoca, pero Gaspar espera que su exhibición sirva para acabar con esta "injusticia".
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