Hotel Aire de Bardenas, elogio de la soledad desde un oasis

A unos siete kilómetros de Tudela, junto al Parque Natural de las Bardenas Reales, se levanta, como un oasis en medio del desierto, el hotel Aire de Bardenas. Este alojamiento ofrece arquitectura, diseño, comodidad y buena gastronomía, todo sobre un campo de trigo, aislado del mundanal ruido; de hecho, hasta aquí solo llegan huéspedes o algún que otro curioso.

Su innovador diseño le ha hecho ganar una veintena de premios de arquitectura. Cada una de las habitaciones es un cubo independiente con grandes ventanales que nos dan impresionantes panorámicas del desierto. El diseño de las habitaciones, además, está pensado para que disfrutemos de la máxima privacidad posible.

La privacidad es aún mayor si nos alojamos en las suites con patio privado, en las que podremos disfrutar del lujo de una bañera al aire libre. Aire de Bardenas se presenta como un auténtico oasis, especialmente cuando disfrutamos de su piscina con unas vistas al impresionante desierto de Bardenas.

La cocina es un valor añadido único. El hotel tiene su propio huerto, por lo que muchos de los platos que aquí se sirven están preparados con verduras y hortalizas recién recolectadas. Las alcachofas horneadas con virutas de ibérico, por ejemplo, son un auténtico manjar, al igual que los famosos cogollos de Tudela.

Y si disfrutamos del Aire de Bardenas, resulta casi obligado hacerlo también de la tierra… de Bardenas. El Parque Natural de las Bardenas Reales, con su impresionante paisaje lunar, nos sorprenderá.

Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!