El presidente de la Confederación de Empresarios de Ceuta, Bhagwan Dhanwani, forma parte de la tercera generación de una familia que lleva en la ciudad autónoma más de 80 años. Dedicados a la distribución de productos de regalo, decoración y electrónica, también tienen intereses en promociones inmobiliarias. "Tenemos todo nuestro patrimonio aquí. Seguimos invirtiendo y diversificando en la ciudad y estamos preocupados por el futuro", afirma.

Patronal, sindicatos y partidos de la oposición se han unido para luchar contra el colapso de la frontera con Marruecos, un bloqueo que está ahogando la economía ceutí. Exigen a las administraciones, del PP, que tomen medidas urgentemente.

¿Cómo viven la situación por la que atraviesa Ceuta?

Con preocupación. Es un problema enquistado del que está costando mucho salir y que según pasan los días empeora.

¿Qué les exigen a las autoridades?

Les hemos solicitado actuaciones pero las cuestiones en las administraciones van muy lentas. Hemos pedido más inversión, más medios técnicos y humanos. La frontera tiene que ser más fluida, más dinámica, que funcione durante más tiempo. Siempre está a medio gas. Hace falta una frontera moderna. Ceuta es la entrada de Europa y parece que se les olvida.

¿Qué opinan de la ampliación que se ha anunciado?

No se pueden anunciar a bombo y platillo grandes soluciones y que tarden tres o cuatro años, porque entonces el problema sigue estando sin resolver, y por supuesto, pueden hacer miles de inversiones, pero si no las dotan de medios humanos de nada sirven. Sobre todo tienen que coordinar todos estos temas, a través de Europa, con el país vecino. Ceuta no es soberana. Es un problema de dos fronteras y de dos países.

¿Resulta complicado sentarse a hablar con Marruecos y llegar a algún tipo de acuerdo?

Nosotros en eso no podemos opinar. Desconocemos si hay ese tipo de conversaciones, si las hace la ciudad de Ceuta o si se están haciendo directamente desde Madrid. Lo que está claro es que si dos vecinos se ponen de acuerdo las cosas irán de manera mucho más fluida. Conminamos a que deben ponerse de acuerdo ambas partes.

¿Desde cuándo ven que esto es insostenible?

Ahora en mayo hace un año que lo pusimos de relieve. Esto se veía desde hace tiempo pero entonces se celebró la primera manifestación en muchísimos años en la que todos los empresarios y los comerciantes se pusieron de acuerdo para hacerles ver a las administraciones que algo estaba pasando. Nos prometieron ayudas y soluciones inmediatas y se ve que poco se ha podido avanzar.

¿La apertura del Tarajal II, con el efecto llamada que ha tenido y el desvío de porteo a la frontera común, ha empeorado la situación?

Eso es posible y se seguirá dando porque el porteo existió, existe y existirá. Entiendo que es un problema que está sobrepasando las infraestructuras. Si antes recibías a 5.000 personas y ahora recibes a 20.000 tendrás que multiplicar por cuatro. Hay que adecuarse a las necesidades. Deben reglamentarse, luego deben ponerse de acuerdo y después abrir más carriles para que pasen turistas, gente que viene a portear…

¿Cómo valora la situación de las porteadoras?

A nosotros no nos gusta pero no es el empresario de Ceuta el que propicia este tipo de imágenes, al contrario, incluso hay varias iniciativas de los propios comerciantes del polígono en las cuales se les factura en bultos pequeños, se les propicia que los lleven en carros, en maletas con ruedas… Pero es una cultura que en ese país es difícil de instaurar.

Algo se puede hacer desde este lado para dignificar ese trabajo.

Desde el lado de Ceuta se está haciendo. Se están haciendo bultos más pequeños, para que puedan ser trasportados con los carros y evitar sobre todo la imagen de una persona mayor, o una señora, llevando bultos de 70 u 80 kilos. Se sabe que tienen que llevarlos de diez o doce kilos pero a raíz de las necesidades económicas que tienen, ellos mismos intentan hacer el porteo a su modo particular y en lugar de un bulto quieren llevar dos o en lugar de dos, cuatro. Es un problema que nosotros no podemos controlar. El comerciante de Ceuta lo único que hace es dispensar, vender y proveer. Son ellos los que dicen cómo quieren hacerlo.

Alrededor de esta actividad se han generado unas mafias y están proliferando las naves consigna.  

Todo el comercio ilegal está realizando una competencia desleal a lo legalmente establecido y desde la Confederación de Empresarios y desde la Cámara de Comercio se está luchando contra ello. Nos hemos puesto de acuerdo con la administración para fomentar todo tipo de ayudas y de control porque es una competencia desleal que nosotros no queremos. Estamos de acuerdo en que hay que acabar con esos negocios fraudulentos. Creo que con las últimas medidas ya se está controlando mucho más.

En la imagen, Bhagwan Dhanwani

¿Qué les parece que no haya una aduana comercial entre los dos países?

Mal. Pensamos que podría ser una solución pero en este caso dependemos de un interlocutor de un país tercero y un país tercero, como siempre, pondrá peros para no reconocerlo.

¿Cuántos negocios han cerrado?

No tenemos esos datos, los estamos recabando. Pero es importante. Se está hablando de un 20 o un 25%.

¿Cuándo fue la última vez que se reunieron con la Delegación?

A finales de noviembre o diciembre. En breve vamos a tener otro encuentro para ver los avances de las cosas solicitadas en su día, qué se ha hecho y qué queda por hacer.

Si no se implantan las medidas que reivindican, ¿qué acciones llevarán a cabo?

En breve va a haber una manifestación para seguir recordando a la administración el incumplimiento de las cosas que se le han pedido.

¿Tienen constancia de que la Guardia Civil está confiscando productos para consumo propio?

Sí. Muchos comerciantes están empezando a acompañar a sus clientes para poner las denuncias al respecto porque cuando se lo comunicamos a la administración correspondiente nos dice que sin pruebas no pueden actuar. Estamos haciendo hasta reportajes gráficos.

¿A qué se debe?

No nos lo han dicho, estamos pendientes de que nos lo comenten. Es algo que sucede desde hace poco. Desde hace unos meses.

¿Acabar con exención del Acuerdo de Schengen para quienes residen en la provincia de Tetuán sería positivo?

No podemos valorarlo. Estamos en ello porque lo hemos leído pero no nos consta. En breve nos contarán cuáles son los planteamientos que han hecho en estos meses y cuáles son las soluciones porque se supone que han tenido varias reuniones con los ministerios implicados.

¿Es la situación más complicada que han vivido?

Sí. Ceuta tiene una gran capacidad de reinventarse y todas las crisis las hemos superado pero esta está siendo bastante tediosa y larga.

Es significativo que se hayan unido por una misma causa patronal, sindicatos y oposición.

Por algo será. Porque la situación es bastante preocupante. La gente de Ceuta lleva establecida toda la vida aquí. Es una sociedad que ha ido avanzando según las necesidades que han surgido a nivel empresarial y comercial y estamos preocupados porque somos segundas y terceras generaciones de empresarios que no sabemos cuál es el futuro.

Organizaciones empresariales nacionales remiten a hablar con las delegaciones ceutíes cuando se les pregunta por este asunto. ¿Se sienten desamparados?

Bastante, pero entiendo que todo se vive acorde a la situación económica del país. Todo el mundo tiene sus problemas y cada uno vive lo suyo.