La exmujer de Harvey Weinstein, sobre el escándalo sexual: "Tengo momentos de ira, confusión e incredulidad"

La exmujer de Harvey Weinstein, Georgina Chapman, ha roto su silencio y habla por primera vez en Vogue desde que saltó el escándalo de abusos sexuales en el que se ha visto envuelto el productor de Hollywood.

A principios de esta semana, Scarlertt Johansson aparecía en la gala del Met con un vestido de la firma de moda de Chapman, convirtiéndose en la primera famosa en volver a lucir sobre una alfombra roja un diseño de Marchesa.

Cuando la revista femenina le preguntó si alguna vez tuvo sospechas de que sucedía algo, la diseñadora de moda respondió que no. La entrevista se produce siete meses después de que una mujer, la primera de más de centear, acusase a Weinstein de agresión sexual y acoso, algo que el magnate siempre ha negado. Chapman admitió que había sido "terriblemente ingenua" y que se sintió "humillada y rota" cuando se desencadenó el escándalo.

Weinstein y Chapman se casaron en 2007 y tienen dos hijos en común de 7 y 5 años. Sin embargo, tras diez años de matrimonio, ella anunció en la revista People que lo dejaba, días después de que surgieran las acusaciones. "Tenía lo que pensaba que era un matrimonio muy feliz. Amaba mi vida", dijo. Para ella, el productor era "un compañero maravilloso, un amigo y un confidente".

La cofundadora de la firma Marchesa confesó que cuando comenzaron las denuncias estuvo cinco meses sin querer salir de su casa y canceló en enero los desfiles de la colección otoño-invierno 2018 de Marchesa. La decisión alimentó los rumores de que la marca estaba en problemas.

Sin embargo, Chapman dice que fue ella quien tomó la decisión de no ofrecer ropa para la temporada de premios. "No pensamos que fuera apropiado dada la situación", dijo. "Pensé, '¿quién soy yo para desfilar con todo esto pasando? Todavía no estoy bien. El otro día estaba subiendo unas escaleras y me vino a la mente todo lo que había pasado y es como si mis pulmones se quedaran sin aire", comentaba.

"Tengo momentos de ira, de confusión e incredulidad. Y tengo momentos en los que solo lloro por mis hijos", explicaba Chapman que se derrumbó en varios momentos de la entrevista. "¿Qué van a decirles las personas? Mis hijos aman a su padre", añadió.

Cuando comenzó la pesadilla la británica era incapaz de "mantener la comida dentro de su cuerpo", lo que le llevó a perder más de cuatro kilos en la primera semana de los escándalos. "Mi cabeza no paraba de darle vueltas a todo. Para mí era difícil porque la primera denuncia fue mucho antes de conocerlo, así que en ese momento no podía tomar una decisión en firme".

Después, siguieron saltando más historias de mujeres y fue cuando la diseñadora británica se dio cuenta de que no se trataba de "un incidente aislado". Así que decidió "alejarse y sacar a los niños de allí".