La peor sequía de los últimos cinco años pasa factura a Aragón y ya obliga, en pleno invierno, a extremar la precaución contra los incendios forestales y a paralizar los desembalses. En enero se registraron en Aragón 29 fuegos, casi el triple de los que hubo en el mismo mes del año pasado (fueron 11). Y la situación de los ríos está en estado de emergencia y amenaza con desabastecer a los regantes.
En total, desde Año Nuevo han ardido en la comunidad 26,44 hectáreas, cifra muy superior a las escasas seis hectáreas que se quemaron en enero de 2007, según los datos que maneja la DGA. El problema es tal que la Consejería de Medio Ambiente ya prevé adelantar la prohibición de realizar fuegos al aire libre al próximo 1 de marzo.
De las 26 hectáreas que ardieron en enero, 3,16 fueron arboladas, frente a las 0,39 del mismo mes del año pasado. Sólo 12 de los 29 fuegos tuvieron consecuencias graves en el campo, y el resto, 17 incendios, fueron conatos que se cogieron a tiempo.
Problemas para los cultivos
Los regantes y agricultores son, sin embargo, los más afectados por la sequía y ya han pedido que se declare como «catástrofe nacional». Piden que se palíen las pérdidas y se busquen soluciones.
Las reservas de los embalses están en el 46%, cuando el año pasado se situaban en el 60%. Con estas cantidades no se puede garantizar los usos agrícolas para la campaña de verano.
La Comisión de la Sequía decidió ayer solicitar al Ministerio de Medio Ambiente que se incluya la cuenca del Ebro en el decreto de medidas extraordinarias. Por el momento, el abastecimiento del agua de boca está garantizado.
CONSULTA AQUÍ MÁS NOTICIAS DE ZARAGOZA .
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios