Las votaciones eran interminables. El festival de Eurovisión conectaba con cada uno de los más de 40 países que concursaban e iban diciendo los puntos que el publico de cada país había otorgado a los países finalistas. Después, se pasó a leer sólo los 8, 10 y los famosos 12 puntos.

Actualmente, los portavoces de cada país sólo dicen a quién le ha dado el público, a través del televoto, los doce puntos de su país y éstos se suman a los que ha dado el jurado profesional previamente. Así, ahora el ganador de Eurovisión es el que más puntos suma entre los dos criterios.

Pero Eurovisión le da una vuelta de tuerca a la final y hace de la lectura de votos un momento aún más emocionante, de forma que sólo cuando se sepa la última votación del último país pueda saberse quien ha ganado.

En Tel Aviv los países se clasificarán primero con el voto profesional, revelando un primer ranking y unas posiciones provisionales. Después pasarán a leerse los puntos del televoto, pero se empezará a sumar los puntos del público por el país que tenga menos puntos del jurado.

Así, se irá subiendo en la clasificación, hasta que se llegue al país que esté arriba del todo, lo que hará que hasta el último momento no se sepa el país ganador, pues el más votado por el jurado podría tener pocos puntos del público y en consecuencia, ser superado por el segundo, por ejemplo.

Tras todas las actuaciones, se podrá votar a través de la app (Eurovision Song Contest) durante 15 minutos, enviando un sms al número 27734 con el código: CANCIÓN seguido de los dos dígitos de la canción o llamando al número de teléfono 9058100.

Los votos del jurado constituyen el 50% del total, ya que la otra mitad viene de los espectadores. Se puede votar a cualquier país menos al tuyo.

Con este sistema, tienen más valor los votos que coinciden entre varios miembros del jurado que los individuales. De esta manera, si una canción obtiene la máxima puntuación de cuatro de los cinco miembros, es muy probalbe que obtenga la máxima puntuación.

Hasta el año pasado, los votos individuales de cada miembro del jurado tenían el mismo valor y se calculaba la media para obtener la puntuación final. De esta manera, por ejemplo, si un candidato obtenía la máxima puntuación de cuatro miembros pero el quinto le coloca en el último lugar, no obtendrá la mejor puntuación a pesar de la casi unanimidad.