Gastronomía

Tofu, seitán y tempeh: diferencias y cómo cocinarlos de la manera más adecuada

Noodles con tofu y kimchi
LA GULATECA

Aunque se utilizan en Asia desde hace siglos, solo hace unas décadas que el tofu, y en menor medida el seitán y el tempeh, empezaron a dejarse ver por aquí. Primero como ingrediente usados principalmente por vegetarianos y veganos, aunque en los últimos tiempos su consumo se ha popularizado más allá de estas dietas.

La carne no goza últimamente de muy buena prensa, y aunque seguimos siendo un país eminentemente omnívoro, cada vez son más las personas que deciden reducir el consumo de carne por razones de salud o medioambientales. Y es ahí donde entran alternativas como estos alimentos elaborados a base de vegetales y cereales.

De hecho, los tres ingredientes de los que hablamos son muchas veces usados como sustitutos de la carne. Tanto si se trata de darles esa función o simplemente de probar recetas nuevas, es interesante conocer sus propiedades, las diferencias entre ellos y descubrir cómo se cocinan.

Tofu

De origen chino y con 2.000 años de antigüedad, está hecho con leche de soja que después de coagular da como resultado una cuajada vegetal rica en vitaminas, fibra, hierro y calcio. Es un alimento que contiene proteína de alta calidad. Dependiendo de con qué esté coagulado (sales, ácidos...) se consiguen diferentes tipo de tofu (firme, extrafirme, sedoso...).

Tofu

El tofu en sí es bastante insípido pero suele absorber con facilidad los sabores de los ingredientes con los que se cocina, por tanto marinarlo antes de cocinarlo es una buena idea para que tenga buen sabor. Con este truco y algunos más podemos hacer recetas sabrosas además de sanas como estos noodles con tofu y kimchi.

Seitán

Aunque mucha gente piensa que el seitán también proviene de la soja, en realidad no es más que gluten de trigo procesado para separarlo del almidón y texturizado, Algo que, por cierto, los celíacos o intolerantes tienen que tener en cuenta.

Brochetas de seitán

También originario de China, es un alimento bajo en carbohidratos, y contiene minerales como hierro, selenio y calcio. Aunque también tiene gran cantidad de proteínas, se consideran de baja calidad, al contrario de lo que pasa con la proteína de la soja (tofu y tempeh). De hecho, son muchos los que cuestionan que se trate de un alimento saludable que merezca una presencia destacada en nuestra dieta.

El seitán es bastante sabroso y tiene una agradable textura esponjosa. Es muy fácil cocinar con él.  Podemos utilizar prácticamente cualquier receta de carne o pescado y usarlo como sustituto.

Tempeh

El tempeh también es asiático, concretamente de Indonesia y, al igual que el tofu, proviene de la soja. Las semillas se humedecen, se cocinan y se dejan fermentar entre 24 y 36 horas. Al ser básicamente soja, además de contener probióticos por la fermentación que facilitan la digestión, es muy rico en proteínas y mantiene todas las propiedades originales del vegetal como hierro, calcio, fibra y vitamina B.

Crepes rellenos de tempeh.

La textura del tempeh es algo más dura que la del tofu y tiene un sabor característico que recuerda a los frutos secos o incluso a algunas setas.

Aunque podemos marinarlo, rebozarlo o acompañarlo de alguna salsa, al tener más sabor que el tofu podemos simplemente hacerlo a la plancha como si fuera carne. Cocinar con tempeh no tiene por que ser aburrido y podemos preparar platos tan ricos como estos crepes sin gluten rellenos de tempeh.

loading...