Vacaciones antiestrés: cuatro rincones perfectos para relajarte este verano

La cuenta atrás para las vacaciones ya ha comenzado. Los meses de verano son los días elegidos por muchas personas para desconectar del trabajo o los estudios y realizar una escapada.

Hay quienes quieren unas vacaciones llenas de aventura, turismo y adrenalina, y quienes prefieren calma y tranquilidad. Si te decantas por esta última opción, te dejamos cuatro planes por España para dejar atrás el estrés del día a día. 

Una localidad turolense llena de encanto que destaca por los colores teja de sus fachadas, por contar con uno de los sistemas defensivos más importantes de Aragón y por sus calles empinadas y empedradas. Pasadizos, escalinatas, callejuelas e irregulares muros forjan el entramado de esta pequeña población. Un municipio que está considerado como uno de los pueblos más bonitos de España.

Es una ciudad de la provincia de Málaga que se encuentra situada sobre un desfiladero. Entre los monumentos más importantes de la ciudad destaca el Puente Nuevo, una edificación de piedra que se extiende sobre el desfiladero y de donde se pueden ver unas increíbles vistas. Este municipio malagueño también es conocido por ser la cuna de la tauromaquia. Su plaza de toros de la Real Maestranza es una de las más antiguas de España. Por otro lado, los baños árabes con los que cuenta la ciudad, son los mejor conservados de España. Además de estos monumentos, la localidad también es conocida por su Ruta del Vino.

Municipio de la comarca del Alto Ampurdán, en la provincia de Gerona. Destaca por sus casas blancas, de hecho, esta es una de las instantáneas de moda en Instagram. Entre las paradas obligatorias si visitas la ciudad destaca la Casa Museo de Salvador Dalí, donde el pintor vivió y trabajó, el Casco Antiguo con sus casas blancas y calles empedradas y el paraíso natural de Cabo de Creus.

Son el paraíso de las costas gallegas. Famosas por sus playas de fina arena blanca y aguas cristalina. Un oasis de paz y tranquilidad en plena naturaleza. Las islas de Monteagudo, Faro y San Martiño son las más grandes, pero solo se pueden visitar las dos primeras. Desde Vigo y Cangas, salen a diario los catamaranes que llevan a sus playas de aguas claras así como a un increíble santuario de aves.