Los organizadores del Orgullo dicen que su público objetivo son rentas "medio-altas" y la mitad heterosexuales
- Definen a los asistentes como personas con "debilidad por las marcas que participan en su estilo de vida".
El público objetivo del Orgullo LGTB de Madrid está formado, según los propios organizadores del evento, por personas con un nivel de renta "medio-alto" y heterosexuales en un 50%, y los asistentes al evento tienen, indican, "debilidad por las marcas que participan en su estilo de vida".
Así consta en la información que los organizadores —la asociación Cogam, la Federación Estatal LGTB y la asociación Aegal— facilitan a los patrocinadores o sponsors que invierten en el desfile de carrozas del 6 de julio y el resto de eventos enmarcados en el Orgullo 2019.
Según el target, los participantes del Orgullo LGTB son mujeres y hombres entre 18 y 40 años y heterosexuales en un 50% de los casos. Además, son "marcadores de tendencia, innovadores y vanguardistas" que "están al día de lo último y tienen debilidad por las marcas que participan en su estilo de vida".
Este gran evento LGTB está considerado uno de los mayores que se celebran en España, con una estimación de asistencia de 3,5 millones de personas y unos ingresos para la ciudad de alrededor de 200 millones de euros.
El Orgullo de Madrid ha sido objeto de críticas por los propios miembros del colectivo LGTB en muchas ocasiones, que consideran que el evento estaría perdiendo su vertiente reivindicativa para convertirse en un elemento de marketing.
La primera vez que el Orgullo LGTB dejó de ser solo una manifestación para pasar a ser también un evento festivo —definido por algunos activistas como "la manifiesta"— fue en 1997, cuando unas pocas carrozas participaron por primera vez en la protesta.
En esta edición, el Orgullo LGTB de Madrid pretende rendir homenaje a los acontecimientos de hace cincuenta años, cuando se produjo una revuelta en el bar Stonewall Inn de Nueva York que dio origen a la reivindicación del movimiento LGTB en el mundo.