Viajes

Una azafata revela por qué no hay que pedir café en un avión

Imagen de dos auxiliares de vuelo preparando cafés.
Oxfordian Kissuth / WIKIPEDIA

Pocas personas conocen más detalles de los entresijos de los aviones y los vuelos que las azafatas. Por eso, es muy revelador conocer sus opiniones y sus secretos para así, tomar decisiones en consecuencia. Jamila Hardwick es una azafata que ha contado a Business Insider qué es lo que nadie debe hacer en un avión: pedir café o té.

"Lo que pasa con el café y el té es que las tuberías rara vez se limpian", explica Hardwick. La cuestión es que las aerolíneas sólo están obligadas a desinfectar sus tanques de agua cuatro veces al año, por lo que por experiencia, las propias azafatas ni se plantean tomar café o té naturales a bordo de los aviones.

Otra revelación de Jamila Hardwick es la bebida por la que las azafatas más se molestan cuando se la piden: la Coca Cola Light. Se agota más que el resto de refrescos y el tiempo que invierten en reponer la bebida lo pueden emplear en servir otras tres bebidas.

Hay más consejos: si vas a volar, lleva encima una toallita húmeda, porque la bandeja suele estar repleta de gérmenes, algo también aplicable a las fundas de los asientos y los protectores para la zona de la cabeza: "Trae el tuyo. Se lavan, pero no estamos seguros de lo bien que se lavan", explica Hardwick. Una última petición: no le pidas a una azafata que te ayude a colocar tu equipaje en el compartimento superior: "No nos pagan hasta que la puerta de embarque esté cerrada. Si nos lesionamos al poner esa bolsa en el compartimento superior, no podemos tratarlo como una lesión en en el trabajo".