Los trucos del Palacio de Buckingham para evitar que la reina Isabel II sea envenenada

Un documental emitido esta semana en la televisión británica ha revelado las ingeniosas medidas que el Palacio de Buckingham tiene para evitar cualquier intento de asesinato de la reina Isabel II a través de la comida.

El programa Secrets of the Royal Kitchens (Secretos de las cocinas reales) ha entrevistado a la experta en la familia real británica Emily Andrews, que ha contado las tretas del personal que trabaja para ellos.

"Una vez la comida está emplatada, un sirviente elige aleatoriamente uno de los platos para servir a su majestad", indica Andrews. "Si alguien quisiese envenenar a la monarca, tendría que envenenar a todos", añade.

La monarca es la encargada además de supervisar toda la comida que se sirve en palacio al ser quien aprueba los menús que le presentan los cocineros en el llamado "libro del menú real".

"El chef elabora menús para tres días y eso nos da tiempo suficiente para conseguir todos los productos y prepararlos", asegura Darren McGrady, que trabajó como chef de la reina durante 15 años. "Cuando el libro del menú llega a la reina, traza una línea en todos los platos que no quiere", indica.

Asimismo, Isabel II decide qué ingredientes está prohibido utilizar en las comidas —entre ellos el ajo— o cuáles deben utilizarse con moderación —como la cebolla—.

Sobre el tipo de comidas que se sirven en palacio, el chef Darren McGrady sostiene que la monarca tiene preferencia por la gastronomía tradicional británica y francesa y no suele experimentar con nuevos alimentos muy a menudo.

McGrady también ha desvelado la curiosa forma que tiene Isabel II para comunicarse con el personal: "Si sale a cenar fuera, dibuja una línea en una página (del libro del menú), y si tiene un invitado, traza dos o tres líneas, así sabemos que está entretenida".

El documental también revela las estrictas reglas que los invitados de la reina deben cumplir durante las lujosas comidas en palacio. "No puedes sentarte hasta que se siente la reina. Cuendo ella empiece a come, entonces puedes empezar a comer", agrega la experta Emily Andrews.