Comienza el proceso participativo para "pensar" el futuro de la plaza del Ayuntamiento como espacio peatonal

El diseño final de la plaza del Ayuntamiento de València responderá no solo a las directrices que marque el Gobierno municipal al despacho de arquitectos que se imponga en el futuro concurso de ideas, sino a unas directrices fruto de un proceso participativo que acaba de comenzar. Bautizado como Pensamos la plaza, integrará las aportaciones de ciudadanos que usan más o menos la plaza y también de colectivos vecinales, sociales, económicos y culturales.

La concejala de Participación, Elisa Valía, y la vicealcaldesa y responsable de Urbanismo, Sandra Gómez, han presentado este martes el proyecto, y en concreto la página web que servirá de base para recoger, canalizar y unificar todas estas aportaciones.

En líneas generales, la primera fase será "de escucha", según Valía, y la segunda corresponderá a la "transformación física" de la plaza por parte del equipo de Urbanismo. De este modo, el proceso de participación será el primer paso de un proyecto "grande y ambicioso" como es la remodelación y peatonalización de la plaza del Ayuntamiento, la más emblemática de la ciudad, y que se inserta en el plan València, ciudad de plazas, que también prevé intervenir progresivamente en las del entorno del Mercado Central y de la Lonja, la de la Reina y San Agustín.

El punto de partida será la planta viaria propuesta por el área de Movilidad Sostenible, que blinda el paso del transporte público en el vial recayente al edificio de Correos hacia la calle de las Barcas, con límites prefijados de antemano como los espacios para la mascletà y la plantà de la falla municipal, así como los puestos de flores, cuya ubicación se tendrá que pactar con los propios comerciantes en el seno del proceso participativo.

En cuanto a los criterios del proceso de participación, que ya ha comenzado y que se alargará hasta finales de diciembre, cuando se envíe a Urbanismo el documento final con las conclusiones, se basarán en dos fundamentales: la sostenibilidad medioambiental y la social, en la que se incluyen las perspectivas de la inclusión y de género. "La plaza será sostenible y será feminista e inclusiva" en aspectos hasta ahora poco tenidos en cuenta, como el diseño y la utilización de los espacios públicos, ha afirmado Valía. Además, se tendrán en cuenta la accesibilidad, el confort del espacio y los usos y gestión de la plaza (las actividades).

"Pretendemos situar a las personas en el centro y trabajar la singularidad de este espacio, ya que el proceso no se repetirá como tal porque no hay una plaza equivalente en València" a la del Ayuntamiento por su simbolismo, ha añadido la responsable municipal de Participación.

En cuanto a la organización del proceso, habrá varios grupos de trabajo. Uno denominado motor que incluirá a colectivos con un grado de implicación alto (asociaciones, universidades, actividades económicas, sociales y culturales, discapacidad...), otro de coordinación municipal, que incluirá los distintos servicios del Ayuntamiento afectados por la remodelación, y finalmente una mesa política con todos los grupos con respresentación en el Consistorio. Esta última, que no se llevó a cabo en el proceso de la plaza de la Reina, pretende integrar las sugerencias de la oposición.

Respecto a las fases de su aplicación, la primera, que fija los límites y las dinámicas, ya ha concluido. La segunda consistirá en un "diagnóstico participado" que realizarán las distintas mesas y grupos de trabajo, mientras que la tercera, a partir de la primera semana de noviembre, abordará propuestas de mejora de las anteriores y la visión de futuro. Valía ha afirmado que a principios de diciembre habrá un documento de conclusiones, que posteriormente se evaluará, y antes de Navidad se fijarán las conclusiones definitivas.

Gómez ha recordado que después de Fallas, coincidiendo con el incio de las obras en la plaza de la Reina, se acometerá una "peatonalización blanda" de la plaza del Ayuntamiento, en la que Movilidad Sostenible coordinará los cortes de tráfico y Urbanismo se ocupará de los detalles de la integración paisajística y sea "acorde al paisaje que València quiere proyectar" en su plaza más emblemática.

Valía ha añadido que algunas de las propuestas que surjan del proceso participativo "serán válidas para la fase transitoria de peatonalización blanda". Además, ha afirmado que el éxito de este proceso se comprobará "en la medida en que todos los actores se sientan a gusto" con el resultado final. Respecto a la página web, ofrecerá información sobre el proceso y su desarrollo, y, a partir del 10 de octubre, permitirá rellenar cuestionarios y recibir boletines.