Un abogado dice que los presos de Alcalá Meco intentaron quemar a 'Nanysex'

Varios reclusos de la cárcel de Alcalá Meco intentaron ayer incendiar la celda en la que se encuentra el presunto pederasta Alvaro I.G., conocido como 'Nanysex', según contó un abogado de la acusación particular, Manuel Maza, durante un receso de la vista oral en la Audiencia Provincial de Madrid. El letrado explicó que rompieron los cristales que dan a su cuarto para arrojar una toalla prendida. Además, los presos que le acompañaban en el vehículo que le trasladó al penitenciario, en su mayoría en etnia gitana, le agredieron en el furgón. Sin embargo, Instituciones Penitenciarias asegura que las declaraciones del abogado son "absolutamente falsas".

El supuesto pederasta también fue golpeado ayer durante el juicio por el padre de una de las víctimas y sufrió un intento de agresión por parte de la madre de uno de los menores.

Al llegar a la prisión, 'Nanysex' fue trasladado a un módulo más conflictivo de Alcalá Meco donde los reclusos del patio rompieron la ventana de su celda e introdujeron una toalla en llamas. La Sala ha referido a la defensa de Alvaro que las medidas de seguridad en la prisión dependen de Instituciones Penitenciarias.

Piden 39 años de prisión

Tras los altercados, el acusado resultó levemente herido, por lo que tuvo que ser asistido en la cárcel. El director del centro intervino para poner fin al "linchamiento" al que estaba siendo sometido el presunto pederasta.

Una vez que se retome la vista, testificarán los psiquiatras que examinaron a Alvaro en la prisión tras ser detenido, diagnosticándole una parafilia de tipo pedófilo. 'Nanysex' se enfrenta a 39 años de prisión por varios delitos sexuales. En su declaración ante el juez reconoció que abusó de cinco niños de 1 y 2 años a los que sometió a vejaciones.