Un grupo de empresarios italianos abuchea a Berlusconi por criticar a los jueces
- La guerra abierta entre Silvio Berlusconi y los magistrados se encona.
- Berlusconi, imputado por corrupción judicial, afirma que los jueces que le persiguen son "la metástasis de la democracia".
- El miércoles logró que el Senado aprobara un decreto que le inmuniza.
Berlusconi, que tiene abiertos dos procesos, uno de ellos por corrupción, recibió los silbidos y gritos de desaprobación durante su intervención ante la asamblea de empresarios del sector del turismo, el comercio y la artesanía Confesercenti.
Los primeros silbidos vinieron justo cuando dijo que "los jueces politizados son la metástasis de la democracia".
"Me habéis invitado vosotros...", respondió el magnate de la televisión y luego continuó con su ataque hacia los jueces al afirmar: "Os doy un dato. Del 1994 al 2006 ha habido más de 789 fiscales y jueces que se han interesado del peligro Berlusconi".
Según el jefe del Gobierno italiano, el interés de los jueces era el de "subvertir la democracia", pero recalcó que "no lo han conseguido y no lo conseguirán".
"Los ciudadanos tienen el derecho de ver gobernar a quien ellos han escogido, a través de elecciones libres, para guiar el país", argumentó.
Tras esas declaraciones continuaron los abucheos y aunque estaban mezclados con aplausos de apoyo y aprobación, Berlusconi añadió: "Me indigna cuando alguno se deja llevar por el ala justicialista de la magistratura".
"Tengo también fe en la magistratura, pero después de un calvario como éste, estoy indignado", aseguró.
Blindarse con las leyes
Los ataques de Berlusconi a los jueces son recurrentes. Por ello, Berlusconi busca blindarse con nuevas leyes: el miércoles el Senado aprobó un decreto ley del Gobierno que paralizará uno de los procesos que se sigue contra 'Il Cavaliere'. El nuevo decreto bloqueará durante un año todos los juicios por delitos cometidos antes de junio de 2002 y penados con menos de 10 años de cárcel
Berlusconi está acusado de haber pagado supuestamente más de medio millón de euros a un testigo para que falsificara su declaración en otros dos juicio contra él, de los que salió absuelto.
Las asociaciones de magistrados criticaron esa norma, porque aseguran que para frenar su proceso, Berlusconi bloquea unos cien mil casos y "pone así a la justicia de rodillas".
La oposición también ha censurado en varias ocasiones al que es el tercer hombre más rico de Italia por el uso del Gobierno para su interés personal.