Robyn Crawford, la mejor amiga de Whitney Houston, confirma que fueron novias

  • "Queríamos estar juntas y eso significaba estar solamente nosotras", asegura en su autobiografía.
  • "Si la gente se enteraba de lo nuestro, lo usarían en nuestra contra. Eran los 80", recalca.
  • Da validez al tan extendido rumor de que la diva era bisexual.
La cantante Whitney Houston, durante una actuación en la televisión alemana en 2009.
La cantante Whitney Houston, durante una actuación en la televisión alemana en 2009.
GTRES
La cantante Whitney Houston, durante una actuación en la televisión alemana en 2009.

"¿Quién no se ha dado un pipazo con una amiga?", dijo hace ya muchos años Lola Flores. Desde luego, Whitney Houston sí. O eso es lo que ha escrito en su autobiografía su mejor amiga, Robyn Crawford.

Crawford, que conoció a la famosa cantante en 1980, cuando ambas coincidieron como supervisoras en un campamento de verano (ella tenía 19 y Houston, 17), ha confirmado así los rumores que las unieron en aquellos años y quizá por miedo a la pérdida de ventas, siempre se quedaron en vox populi.

En A Song For You: My Life with Whitney Houston (Una canción para ti: mi vida con Whitney Houston, en español), Crawford repasa, tal y como ha desvelado la revista People, cómo durante dos décadas fueron uña y carne y, como ella misma confiesa, "he llegado al punto en el que necesitaba dar la cara por nuestra amistad".

Ahora, la entrenadora de fitness, de 56 años, se siente legitimada y necesitada de romper un silencio de años. "Sentía la necesidad de levantarme y compartir a la mujer que había detrás de tan increíble talento", remarca.

Hay quien cree que este libro lo publica por dinero, pero el medio recuerda que Crawford se negó a participar en ninguno de los documentales que se han hecho sobre la artista desde que muriese en 2012, algunos de los cuales sacaron a la luz datos sobre su sobredosis o esta misma relación.

En el libro, rememora que conectaron en aquel campamento de inmediato y que le dijo a la futura diva "Voy a protegerte". "Queríamos estar juntas", añade, "y eso significaba estar solamente nosotras".

Crawford se convirtió en uno de los grandes apoyos de la protagonista de El guardaespaldas y en receptora de sus intimidades y dudas, así como consejera y amiga hasta que se separaron con el cambio de milenio.

Pero su relación física, recuerda Crawford, duró mucho menos: dos años, hasta 1982, cuando Whitney Houston firmó un contrato discográfico con Clive Davis para Arista Records. Añade Crawford que como símbolo de aquel final la cantante le regaló una biblia.

"Me dijo que no deberíamos llegar a lo físico nunca más porque haría nuestra aventura todavía más difícil. Decía que si la gente se enteraba de lo nuestro, lo usarían en nuestra contra. Y en los 80 era como se sentía", narra Crawford cómo era vivir la homofobia en aquellos años.

Es por esa relación especial que guardó el secreto, no llegando a confirmarlo nunca, así como las presiones por parte de la familia de la diva. Llega a confesar que la madre de Houston, la cantante de góspel Cissy Houston, les decía que no era normal que dos mujeres estuviesen tan unidas. "Pero es que nosotras estábamos muy unidas", reprende Crawford ahora.

"Nunca hablamos de etiquetas, de si éramos gays o lesbianas", afirma la entrenadora personal sobre su pertenencia al colectivo LGTB. "Simplemente vivíamos nuestras vidas y esperábamos que todo se mantuviera así para siempre", recalca.

Mientras que Houston podría ser un referente bisexual, puesto que en 1992 se casó con Bobby Brown, Robyn Crawford es abiertamente lesbiana y está casa y con dos hijos.

"Whitney sabe que yo la quería y yo sé que ella me quería. De verdad que lo significábamos todo la una para la otra", remata así Crawford su vida con el icono, puesto que ahora ve que el mundo necesita saber "la historia de quién era Houston antes de la fama".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento