Jeanine Áñez, la senadora que presidirá Bolivia con el apoyo del ejército
- Esta abogada de 52 años ha pasado los 10 últimos haciendo oposición a Evo Morales en el Senado boliviano.
- La autoproclamada mandataria tomó posesión junto a una Biblia, una cruz y el Alto Mando militar del país.
- Una opositora toma el mando interino de Bolivia y Evo Morales denuncia "el golpe más artero de la historia".
- REPORTAJE: "Estamos defendiendo la democracia": la crisis política que ha obligado a dimitir a Evo Morales.
Jeanine Áñez (San Joaquín, Bolivia) ha inaugurado su autoproclamada presidencia declarando la guerra a los símbolos que llevó al poder el exiliado Evo Morales.
Esta abogada de 52 años y hasta hace apenas unos días senadora por el departamento de Beni -situado en plena amazonía y uno de los más pobres del país- se ha investido junto a dos cirios, una enorme biblia y la plana mayor del Alto Mando Militar del país.
Los cambios simbólicos no son una cuestión baladí. Desde que el saliente Evo Morales asumiera su puesto hace 13 años, los símbolos religiosos habían quedado relegados del Gobierno y los actos del Ejecutivo se celebraban en la Casa Grande del Pueblo, un enorme edificio de nueva construcción situado apenas unos metros tras el Palacio Quemado.
Y ha sido en ese último edificio, que Morales consideraba un vestigio del pasado colonial del país, donde Áñez ha querido asumir su cargo. Eso sí, ha decidido mantener la whipala, la bandera indigenista que introdujo el mandatario saliente.
La senadora inició su carrera política allá por 2006, cuando salió elegida como parlamentaria de la Asamblea Constituyente que aprobó la constitución boliviana impulsada por Morales.
Ahora, la presidenta interina de facto, asume el poder con la intención de alcanzar "la reposición del orden constitucional" en lo que, asegura, será un "mandato de carácter estrictamente provisional".
Para lograrlo se ha propuesto dos objetivos: derogar la polémica sentencia del Tribunal Constitucional que permitió a Evo Morales presentarse a una cuarta reelección -cuando la constitución limita a dos los mandatos- y celebrar elecciones, eso sí, "con la presencia de todos los actores que cumplan los requerimientos constitucionales".
El cumplimiento de este segundo requisito parece más complicado, habida cuenta de que ninguno de los miembros del MAS (el partido de Morales) estuvo presente en la toma de posesión y varios se encuentran huidos.
Áñez llegó al Senado en 2010, en representación del departamento de Beni, donde nació. Desde allí, en dos legislaturas consectivas, se situó en la oposición del MAS.
Segunda presidenta en la historia
Pese a su interinidad y las dudas sobre la legitimidad de su movimiento, Áñez se ha convertido en la segunda mujer en presidir la nación sudamericana. El único precedente es el de Lidia Gueiler, que se hizo con los mandos del país entre 1979 y 1980 tras un golpe de Estado militar y fue depuesta por otro.