Antes de conducir, ¿has revisado tu vista?
- Se calcula que, al conducir, el 90% de la información la recibimos a través de los ojos.
- Llevo gafas o lentillas ¿son obligatorias para conducir?
La vista es uno de los sentidos que más peso tiene en nuestra relación con el mundo exterior, que más nos ayuda a conocer lo que nos rodea y que más involucrado está a la hora de conducir. A través de nuestros ojos recibimos un gran volumen de información de la carretera y el entorno que nos rodea esta pueda ser vital en lo que se refiere a seguridad vial. Por todo esto, ¿cuidas lo suficiente tu visión antes de subirte al coche?
Entre el 20 y el 25 % de los conductores españoles, entre 18 y 30 años, nunca se ha sometido a una revisión de la vista, según publican los estudios realizados por algunos centros oftalmológicos y recogidos en páginas web de divulgación y prevención médica. A una mayor edad es habitual revisar la visión, ya que es una de las pruebas necesarias para renovar el carnet de conducir.
Factores que afectan a la vista
La edad es uno de los factores que más afectan a la vista, sobre todo a la hora de conducir. Después de los 55 y más aún tras los 75 años, hay un descenso importante de la capacidad visual, aunque esto no significa que ya no se pueda utilizar un coche .
También hay ciertas patologías (como cataratas, ojos secos o problemas en la retina derivados de enfermedades como la diabetes) y ciertas intervenciones médicas en los ojos (como la cirugía para eliminar la miopía) que pueden provocar visión reducida o distorsionada, por un lado, y fatiga o deslumbramiento visual, por el otro.
La fatiga visual o la vista cansada afecta a la seguridad vial ya que la puede padecer cualquier conductor independientemente de su edad. Esta sensación de cansancio puede darse tras largas horas al volante o por conducción nocturna. Conducir por la noche reduce la agudeza visual hasta en un 70% y nuestro sentido de la profundidad en situaciones de oscuridad es 7 veces menor.
Qué puedo hacer para mejorar mi capacidad visual
Lo primero y lo más importante es saber en qué estado se encuentra tu vista antes de coger el coche (sobre todo para desplazamientos largos en carretera). Si necesitas llevas gafas o lentillas, nunca olvides ponértelas o incluso llevar recambios en la guantera, que nunca se sabe.
Además, si sufres de vista cansada o quieres mejorar tu visión, existen lentes disponibles con un filtro específico para la conducción y las luces de la carretera. Estas gafas especiales mejoran el contraste y la fatiga en condiciones de baja luminosidad, por lo que son ideales para conducir en días nublados o por la noche.