Dover exhibió su particular nuevo estilo musical en un concierto de poco más de una hora en el que las hermanas Llanos y el resto de la banda repasaron los temas de su último disco y los clásicos de una agrupación que acercó las letras en inglés al panorama español.
Amparo y Cristina Llanos, que hace dos años dieron un giro pasando del rock a los ritmos electrónicos, abrieron el telón a las 23.25 horas con "Keep on moving", tercer sencillo de su último disco, "Follow the city lights".
En medio de un escenario copado por luces de neón y efectos visuales, el grupo fue intercalando canciones del nuevo álbum con las del resto de su discografía, temas clásicos rockeros.
"You and me", "Mi sombrero", "Madrid" y "Shine on me" completaron la primera parte de un concierto que logró llenar aproximadamente tres cuartas partes de la Plaza Mayor vallisoletana.
Pero lo mejor estaba aún por venir. Sentada en una de las plataformas del escenario, la vocalista Cristina Llanos entonó las primeras estrofas de uno de los temas más emblemáticos de la agrupación, "Serenade", canción a la que siguieron "Cherry Lee" y "Do ya".
Tras un fugaz descanso, la banda volvió a las tablas para interpretar un bis predecible, en el que interpretaron el primer éxito comercial de Dover, "Devil came to me" y "Let me out", esta última, bandera del nuevo amanecer del grupo.
"Os agradecemos que nos dejéis ser como nosotros queremos, y si critican, que critiquen", subrayó Amparo Llanos, quien aseguró al público que iban a recordar esta noche "para siempre".
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