Kirk Douglas excluye a su familia de su testamento y dona todo a la beneficencia

A solo cuatro días de celebrar la gran fiesta de los Oscar, Hollywood tuvo que vestirse de luto para despedir a uno de los actores de su época dorada. Kirk Douglas, el eterno gladiador, fallecía a los 103 años el pasado 5 de febrero en su domicilio de Beverly Hills, dejando tras de sí un legado de más de 75 películas y papeles tan icónicos como su coronel Dax, de Senderos de Gloria, o su Espartaco, de la película homónima. Una prolífica carrera que, como cabía esperar, también ha dejado una gran fortuna estimada en 61 millones de dólares que, sin embargo, no irán a parar a su familia, según se ha conocido estos días.

Así lo ha publicado Mirror, desde donde han asegurado que, según diversas fuentes, la herencia de Kirk Douglas irá a parar a diferentes obras benéficas con las que colaboró a lo largo de su vida. Entre ellas, destaca la que fundó junto con su esposa Anne Buydens, centrada en personas con bajos recursos y que recibirá, según el citado medio, 50 millones del total.

Cabe destacar que esta fundación acoge proyectos muy variados, tales como becas universitarias, colaboraciones con el Children's Hospital Los Ángeles o la promoción de actos culturales en el Kirk Douglas Theatre de Culver City, una antigua sala de cine que fue restaurada gracias a una donación suya y que ahora ofrece espectáculos en vivo y en directo, entre otros muchos.

Una herencia nada familiar

En la noticia de Mirror  también han asegurado que su hijo Michael –el más conocido del legado Douglas– no será heredero de ninguno de los bienes de su padre, algo que, si nos remontamos a las palabras que el también actor publicó en su cuenta de Instagram, habrá sido bien recibido. "Para el mundo fue una leyenda, un actor de la edad dorada del cine, un ser caritativo cuyo compromiso con la justicia y las causas en la que creyó sentaron un estándar al que aspirar todos", le dedicó.