La Patrulla Águila, "rota de dolor" por el tercer accidente aéreo mortal del Ejército del Aire en seis meses 

La patrulla Águila ha publicado esta mañana un tuit de despedida a su compañero, el comandante Eduardo Garvalena, fallecido este jueves en un accidente "cuando realizaba un entrenamiento rutinario".

Eduardo Garvalena, el piloto fallecido en Murcia, sustituyó al que murió en agosto en otro accidente de la Patrulla Águila

"Rotos de dolor ayer se nos fue un trozo más de nuestra Patrulla Águila", reza el tuit acompañado por una fotografía de Eduardo junto a su avión C-101. "Descansa en paz patrullero", concluye el mensaje publicado en esta red social.

En el argot de la patrulla, Eduardo Garvalena era conocido como Águila 5, es decir, el "Solo" encargado de llevar el avión a sus límites de la forma más segura y espectacular. Era su segunda temporada como Águila 5 y en misiones internacionales participó en 2016 en la "Baltic Air Policing" y en 2018 en la operación Atalanta en Yibuti.

El pasado día 24 Eduardo aparecía en sendas fotografías en la cuenta oficial Twitter de la patrulla junto a sus compañeros con motivo del acto de bienvenida al capitán Juan Carlos Márquez, nuevo Águila 2, tras la marcha de la comandante Rosa Malea, tras tres años de piloto titular.

El personal de vuelo de la patrulla está compuesto por el jefe, siete pilotos titulares y los pilotos reservas, todos ellos pilotos de caza y ataque pertenecientes al 794 escuadrón de la Academia General del Aire, con sede en San Javier (Murcia).

Estos pilotos tienen una doble función pues además de ser pilotos acrobáticos con la patrulla son también instructores de vuelo del curso básico. El jefe es el responsable del equipo y se encarga de tomar las decisiones y de establecer contacto con el mando, siendo el "Zorro" o piloto que desde tierra vela por la seguridad durante las exhibiciones y coordina las pasadas para que salgan con la mayor precisión posible.

Continúa la búsqueda del piloto y de los restos del avión

El Ejército del Aire continúa esta mañana con las labores de búsqueda de los restos del avión siniestrado en aguas del mar Mediterráneo, a escasos mil metros del kilómetro 6,5 de La Manga (Murcia), y del piloto fallecido en el accidente, Eduardo Garvalena Crespo.

Un helicóptero sobrevoló la zona hasta las diez de la noche y poco antes la falta de visibilidad hizo que los medios acuáticos abandonaran la búsqueda del aparato. Durante toda la noche, agentes de la Policía Local de San Javier y de la Guardia Civil han vigilado la playa, y a primera hora de esta mañana se han retomado las tareas de búsqueda.

En el operativo de emergencias en el entorno de la isla Grosa hay efectivos del Servicio Aéreo de Rescate (SAR) del Ejército del Aire y unidades del Grupo de Actividades Subacuáticas (GEAS), así como la patrullera Infanta Elena de la Armada que se incorporó a última hora de este jueves.