La solidaridad entre vecinos sale a la luz cuando más fuerte golpea el coronavirus a España

Los niveles de preocupación y miedo entre la población van en aumento gracias al exponencial avance del coronavirus, que se acerca ya a los 3.000 contagiados, y eso ha provocado gestos humanos de personas consideradas fuera del grupo de riesgo a los que estamos poco habituados. 

La brutal caída en Bolsa, el cierre de colegios y universidades, el colapso de hospitales públicos o el riesgo de despido de muchas personas son la parte más negativa que nos deja la llegada del Covid-19 a nuestras fronteras, pero hay una parte positiva en todo esto, y es que la solidaridad entre vecinos se está reproduciendo con medidas como el ofrecimiento desinteresado a facilitar la vida a los compañeros de edificio.

Anuncios como el que firma Fedra, que al no pertenecer a un grupo de riesgo, se ofrece para ayudar a aquellos vecinos que no tengan ayuda familiar por si necesitan recados como ir a la farmacia, o cualquier otra medida con tal de "atender las necesidades básicas" de sus compañeros de edificio.

Un anuncio idéntico mostraba también Rosalía en su edificio, consciente de que en su comunidad puede vivir gente anciana que, además de pertenecer un grupo de riesgo, no siempre cuentan con apoyo familiar, lo que en una situación como la actual, puede ser definitivo. 

Pero este no ha sido el único caso de solidaridad entre ciudadanos que nos deja este brote de coronavirus. Tras el anuncio del cierre de colegios en varias comunidades autónomas, la oferta de canguros para cuidar a los hijos aumentó más del 400% en plataformas como Milanuncios, pero sin embargo, algunos estudiantes se ofrecieron gratis para ayudar a las familias con los niños, solicitando únicamente los costes de desplazamiento, para no aprovecharse de la situación.