Anabel Pantoja decide pasar la cuarentena por el coronavirus en su nueva casa en Gran Canaria
Con tantos viajes a Gran Canaria para ver a su queridísimo Omar, era lógico que se iba a dar esta situación (si tenemos en cuenta la lógica dentro de la cuarentena por el coronavirus): Anabel Pantoja está pasando el aislamiento por el estado de alarma en su nueva casa de Pozo Izquierdo.
Ya ella lo venía barruntando desde su etapa en El tiempo de descuento, cuando lanzaba sus soflamas como si no tuvieran un destinatario: "Espero que mi negro tenga todos los muebles montados en cuanto llegue". Y vaya que si le escuchó, porque por lo que se ve, su hogar está de punta en blanco.
Y es normal que la sobrina de Isabel Pantoja, visto que su boda casi seguro que se pospone debido al Covid-19 a pesar de todos los detalles que ya venía dando, esté intentando poner su mejor cara a la situación y haya optado, como buena influencer, por dar a conocer su nueva casa a sus seguidores.
Lo ha hecho con varios rincones del hogar en el que están pasando la cuarentena y con el consiguiente hashtag de #Yomequedoencasa, pero sus fans no pueden sino hablar (ahora hay mucho tiempo libre) de la decoración y de la inmensa cantidad de comida y víveres que ha comprado para la cuarentena.
Los techos altos, amplios ventanales y las paredes blancas que otorgan al piso una luminosidad asombrosa, así como la combinación de la madera para los muebles, de tonos más rústicos, con el gris de la piedra de sillas, complementos y escalones, han encantado a su casi millón de fans (952.177 en estos momentos, para ser exactos).
Dos pisos de casa con un concepto diáfano y pulcro, acentuado con un gran espejo y espacios que transmiten tranquilidad, como su dormitorio, una estancia simétrica con vigas vistas, que están consiguiendo que no eche de menos Sevilla, lo que era su temor al dar el enorme paso de mudarse a Gran Canaria.
"No quiero mirar atrás y ver Sevilla porque se me hace un nudo en la garganta. Te digo hasta luego y nos vemos pronto", decía la colaboradora de Telecinco, que en julio cumplirá 34 años, cuando tomó la decisión de irse a vivir con su pareja, quien tiene un negocio de windsurf en la isla.