El Gobierno sigue haciendo compras de material en China, a pesar de las dificultades que pone un mercado internacional fuera de todo control y de que todavía no se ha aclarado qué ha ocurrido con las primeras partidas de tests que no cumplen con los niveles mínimos de calidad. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha elevado este viernes a 578 millones de euros el monto total de los contratos de compra cerrados y pagados con China, en la misma rueda de prensa en la que ha informado de que el número total de diagnósticos que se han devuelto por baja calidad asciende a 650.000.

"El Gobierno sigue trabajando para adquirir todo el material necesario para librar la batalla al virus", ha dicho Illa al término del Consejo de Ministros extraordinario que este viernes ha prorrogado definitivamente el estado de alarma.

Illa ha recordado que esta semana anunció contratos de compra por valor de 324 millones desde China, que este viernes ha elevado a un total de 578 millones.

De esta manera, el Gobierno continúa sus compras en el "complicado" mercado internacional de productos sanitarios. Según ha explicado la ministra portavoz, María Jesús Montero, el gran proveedor, China, reserva para sí el 90% del material que produce y solo dedica a la exportación el 10%, que se disputan el resto de países afectados por la pandemia.

En estas circunstancias es en las que se produjo la compra de un polémico lote de test rápidos de coronvirus que resultaron tener solo un 30% de efectividad cuando deberían tener el 80%, según desveló El País. Por este motivo, el Gobierno explicó hace días que iba a devolver un lote de 50.000 pruebas, 9.000 de las cuales ya habían empezado a distribuirse. Sin embargo, este viernes, el ministro de Sanidad ha elevado a 650.000 el número de diagnósticos que se han reintegrado al proveedor, para que suministre otros con niveles aceptables de efectividad.

"Las 50.000 pruebas que habían llegado no se han llegado a distribuir y van a ser sustituidas todas estas 650.000 por otras que tengan los estándares de calidad que nosotros exigimos", ha dicho Illa.

Proveedor habitual

El Gobierno sigue si revelar quién es la empresa que suministró los test ineficientes. Este jueves la embajada de China advirtió de que no formaba parte de su relación de empresas exportadoras y el Gobierno aclaró después de que se trataba de un "proveedor nacional" homogado por la UE.

Todavía sin identificar a la compañía, este viernes Illa ha dicho que se trata de un "proveedor habitual" del sistema sanitario español.

"Hemos realizado varias operaciones en China para adquirir hasta 5 millones de tests de diagnóstico rápido, unas se ha hecho a través de un proveedor habitual que trabaja con el sistema de sanidad".