Simón evita dar más detalles sobre cómo será la desescalada: "Dar fechas no sería ni prudente ni sensato"

Todavía habrá que esperar para conocer más detalles del plan de desescalada asimétrica y por fases para abandonar el desconfinamiento que planteó el Gobierno el martes.

Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias y epidemiólogo de referencia en el comité técnico que supervisará la desescalada, ha evitado dar fechas concretas y asegura que aún se están ultimando los indicadores sobre los que se trabajará para decidir qué territorios pueden avanzar de una fase a otra.

"La gran mayoría del territorio español parte de la base de que estamos todos en la fase cero". En esta fase, que comenzará el 4 de mayo según el plan del Ejecutivo, podrán reabrir pequeños comercios con cita previa y atención individual y bares y restaurantes podrán ofrecer comida para llevar en sus establecimientos, entre otras cosas.

Simón se ha referido a las fechas que se comunicaron el martes para cada fase del plan como "algunas horquillas amplias que puedan indicar sobre qué fechas se considera que podría estar ya todo avanzado".  "Dar fechas no sería ni prudente ni sensato. Tenemos que tener mucho cuidado, valorar la situación en cada momento", ha expresado el epidemiólogo.

Los indicadores aún no están definidos, pero sí consensuados

Los criterios que se emplearán para definir qué territorio o provincia está preparada para pasar a la siguiente fase aún no están del todo delimitados, ha explicado Simón, lo que sí ha expresado es que se tendrá en cuenta múltiples factores.

"No es un indicador único, la transición no se va a basar en ningún momento en indicadores únicos y en umbrales prefijados porque depende de muchos factores. Sería un poco temerario", ha dicho el facultativo, aunque "sí que tenemos que valorar algún máximo o mínimo que se tenga que producir como orientación", ha matizado.

Lo que sí ha adelantado es que el número de contagios que produce cada persona infectada (el número R) debe ser menor a uno. "Si no hay un número de reproducción menor de uno como promedio no podemos plantear las medidas de movilidad", ha dicho.

Pese a no revelar gran detalle sobre los indicadores, Simón ha asegurado que "están ya prácticamente consensuados" y que falta por cerrar "la interrelación entre ellos para la toma de decisiones". 

Por el impacto desigual que está teniendo la epidemia en España, el médico asegura que “hay zonas en el territorio español ahora mismo que pueden estar en una de las fases más avanzadas, en la fase uno o en la fase dos, incluso alguna puede pensar que puede estar en la fase tres”.

¿Qué significa que no haya un umbral único?

Simón se ha referido a que los indicadores que se utilicen (como podrían ser la cantidad de nuevos contagios o la incidencia en los últimos 14 días) no pueden ser el único criterio para levantar restricciones.

El epidemiólogo ha citado varios factores que se deben conjugar con unas cifras de transmisión bajas. Aparte de una "situación epidemiológica adecuada" (baja transmisión, pocos casos nuevos), los territorios tienen que poder garantizar que tienen capacidades asistenciales suficientes para atender a la población si se produjera un rebrote. 

Además, deben poder garantizar también que las medidas de control se cumplen y que su sistema sanitario tiene la capacidad de detectar, seguir y controlar cada uno de los nuevos casos y trazar sus contactos. 

Por ello, puede ocurrir que comunidades pequeñas, por ejemplo, con un número de casos confirmados nuevos muy inferior a otras, no tengan las capacidades suficientes como para garantizar todos esos factores y otras más grandes pero con más casos sí puedan hacerlo.