Semanas después de que Nissan anunciara que podría cerrar su planta de producción en Barcelona, un centenar de trabajadores de Nissan se han concentrado este miércoles ante el consulado del Japón y la sede de la Comisión Europea en Barcelona para presionar para que la multinacional japonesa se quede en Cataluña. El comité de empresa ha organizado una acción reivindicativa con carteles y proclamas como 'Queremos futuro' o 'Nissan no se cierra'.
Ayer martes, también se produjo una concentración, en la plaza Sant Jaume de Barcelona, en la que representantes de los Comités de Empresa de Nissan exigieron a la automovilística "un futuro real" para las 25.000 familias catalanas cuyos ingresos dependen de la compañía, entre trabajadores y proveedores.
Esta acción se produce dos días antes de que Nissan presente su nuevo plan de reestructuración, y dos semanas después de que el diario nipón 'Nikkei' publicara que Nissan tenía previsto dejar de producir en sus instalaciones en Barcelona. La incertidumbre sobre el futuro de las instalaciones llevó a los Comités de Empresa de Barcelona a iniciar una huelga indefinida el 4 de mayo hasta que la dirección no aclarase sus planes para las fábricas.
El cierre las plantas de la multinacional nipona supondría la destrucción de 3.000 empleos directos y unos 20.000 indirectos en la provincia de Barcelona. Usando telas negras y rojas, han escrito sobre los adoquines de la plaza el mensaje '25.000 familias. Futuro para Nissan YA', que han rodeado de velas coloradas, en una acción de protesta que han secundado los sindicatos CC.OO, UGT, CGT y Usoc.
El cierre de la planta supondría la destrucción de 3.000 empleos directos y unos 20.000 indirectos en la provincia.
El conseller de Trabajo, Chakir el Homrani, ha insistido este miércoles en que ni los trabajadores de Nissan en Barcelona ni las administraciones públicas deben "bajar los brazos" y dar por sentado el cierre de la planta, aunque ha admitido que "la preocupación es máxima".
El responsable del ámbito de trabajo de la Generalitat ha subrayado que la fábrica de Zona Franca es viable y que, hasta ahora, la dirección de la multinacional nipona en Barcelona y Europa e incluso la mundial, en Japón, han señalado que la decisión del cierre no está tomada.
A la concentración de este martes ha acudido la consellera de Empresa y Conocimiento, Àngels Chacón, que ha pedido a la empresa "lealtad y una respuesta clara" al plan de competitividad que el Gobierno y la Generalitat le han planteado para sacar al mercado nuevos modelos. "Seguiremos estando al lado de toda esta gente que se merece que preservemos la planta", y ha dicho que su Conselleria sigue esperando que la dirección les comunique el estado de sus cuentas, a lo que se comprometió hace un par de semanas, ha dicho.
Ha defendido la competitividad de la producción automovilística en Catalunya: "No solo es otorgar ayudas, tenemos un ecosistema que hace viable y competitivo que se siga fabricando en Catalunya". La voluntad de la Generalitat es "luchar hasta el último momento", y preguntada por si el Govern ha tardado demasiado en prestarle atención al conflicto, ha dicho que ella se ha ocupado desde esta cuestión desde que tomó posesión como consellera.
Además, el secretario de Industria y Pyme, Raúl Blanco, ya advirtió a Nissan de que cerrar su planta de Barcelona le costará más de 1.000 millones de euros, frente a los 300 millones que requeriría garantizar su futuro, así como encontrarse con una actitud "nada pacífica" por parte de las administraciones implicadas.
La alianza Renault-Nissan-Mitsubishi cambian de modelo de negocio y se divide por regiones y modelos
La Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi ha decidido este miércoles cambiar su modelo de negocio para reducir en un 40% las inversiones en sus nuevos vehículos y que pasa por un reparto por regiones y modelos.
Para aumentar la competitividad y la rentabilidad de las tres automovilísticas van a potenciar las compras conjuntas y se van a aprovechar las posiciones de liderazgo y fortalezas geográficas para repartirse el mercado global del automóvil y apoyar el desarrollo comercial de sus socios.
El esquema que van aplicar es el de "leader-follower" que conlleva estandarizar plataformas y carrocerías y diseñar vehículos "líder" y "hermanos" en los diferentes segmentos; así como continuar trabajando en el intercambio de productos en vehículos comerciales ligeros, donde el modelo leader-follower ya está aplicado.
La alianza además ha decidido repartir el negocio en diferentes partes del mundo, que ha denominado "regiones de referencia". Así, Nissan será la referencia en China, Norteamérica y Japón; Renault en Europa, Rusia, Sudamérica y África del Norte; y Mitsubishi Motors en la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN) y Oceanía.
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