La espadas siguen en alto entre el Gobierno y la oposición, incluso en la comisión para la reconstrucción en el Congreso de los Diputados, un órgano diseñado para poner en común propuestas para la reactivación económica tras la crisis del coronavirus. Este jueves, el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, compareció en dicha comisión, y pidió al PP "reconocer" el error que supuso "recortar y privatizar la sanidad pública" durante sus años en el Ejecutivo. Además, Iglesias planteó la necesidad de "intervenir" de manera "urgente" el "mercado de la vivienda.

Iglesias compareció un par de días después de que lo hiciera la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, para explicar las claves de la estrategia del Gobierno a largo plazo para amortiguar los problemas sociales derivados de la crisis. Y, en su intervención, se refirió a la necesidad de "garantizar" el derecho a la vivienda -la "trinchera desde la que la gente ha resistido al virus", dijo- desde el Estado en un momento de crisis como el que comienza.

Eso, señaló el vicepresidente, implica que el Gobierno debe "intervenir el mercado" inmobiliario para evitar que haya "familias que se ven privadas de la posibilidad de acceder a una vivienda digna". "El propio Banco de España" lo ha defendido estos días, recordó.

Iglesias, además, se dirigió expresamente a "sus señorías del PP", a quienes instó a admitir que "los recortes de más de 7.000 millones de euros en la sanidad pública, las privatizaciones y la precarización de las condiciones de trabajo de sus profesionales que ustedes perpetraron fueron decisiones absolutamente equivocadas".

Estas decisiones, culpó Iglesias, "nos han debilitado como país para enfrentarnos a una situación como esta". Y "reconocer esta evidencia sería un ejercicio de enorme dignidad por su parte que a muchísima gente, incluidos sus votantes, les gustaría escuchar", planteó el vicepresidente al PP. 

En esta línea, Iglesias planteó la necesidad de reforzar y "reconstruir" la sanidad pública, lo que consideró "la principal lección" que arroja la pandemia. "Si algo tiene que hacer esta Comisión parlamentaria es traducir el consenso que han expresado los aplausos de los balcones a los profesionales sanitarios en un refuerzo sin precedentes de la sanidad pública en nuestro país", sostuvo el vicepresidente, que pidió ampliar este refuerzo al sistema de dependencia, que ha sufrido "recortes de más de 5.000 millones de euros".

Para el vicepresidente segundo también es imperativo revertir "la política de deslocalizaciones de la industria, paralela a la apuesta por un modelo productivo de bajo valor añadido basado únicamente en el pelotazo y en la especulación urbanística". Y, en lo relativo al empleo, Iglesias apuntó la necesidad de combatir la "precariedad laboral" y "reconstruir, en el marco del diálogo social, los derechos laborales que quedaron arrasados como resultado de la reforma laboral". Sobre el futuro de esta norma, no obstante, no ofreció más detalles, pese a la polémica de las últimos días por su posible derogación.

La reforma fiscal

Para financiar este aumento de la inversión pública que, a juicio de Iglesias, es un "consenso" ya asumido por la sociedad, el vicepresidente hizo hincapié en la necesidad de abordar una reforma fiscal que aumente los ingresos del Estado. "La clave para salir de esta crisis, la clave para la reconstrucción, es la inversión pública", y eso se paga dejando "atrás las amnistías fiscales a los defraudadores, la progresiva supresión de impuestos a los más ricos y los privilegios fiscales que permiten a las grandes empresas y al sector financiero aportar menos de lo que les correspondería".

"La mayor parte de la carga fiscal en España recae sobre la clase trabajadora, los autónomos y la pequeña y la mediana empresa, mientras que los que más tienen disponen de instrumentos de ingeniería fiscal que hacen que en la práctica estén aportando mucho menos de lo que les corresponde", denunció Iglesias. Para solventarlo, el vicepresidente insistió en su propuesta de un impuesto a las grandes fortunas, y pidió al resto de los grupos consensuar una propuesta al respecto en la comisión de reconstrucción.

La "justicia fiscal", zanjó Iglesias, es condición necesaria para reducir la desigualdad. Y eso es "una cuestión de justicia social, pero también de eficiencia económica y de seguridad, porque las sociedades más prósperas, más seguras y más eficientes económicamente son las sociedades más igualitarias", sostuvo.