El principal reto de la medicina es actualmente encontrar cuanto antes una vacuna contra el coronavirus. Existen varios proyectos, en concreto cuatro, que son los más avanzados. Uno de ellos es el de la compañía Moderna, con sede en Massachusetts (EE UU), que ya está haciendo pruebas con voluntarios. Y estos están notando ya los primeros efectos secundarios. 

Tal y como recoge el diario médico STAT, uno de los voluntarios, Ian Haydon, sufrió fiebre de hasta 39,5 grados apenas 12 horas después de recibir la segunda dosis. También se desmayó.

Haydon, de 29 años, cree que "hay que encontrar una dosis que haga que el cuerpo produzca anticuerpos y que no provoque demasiados efectos secundarios".

Otro de los intentos es el de la Universidad rusa de Sechenov. 20 voluntarios, informa El Mundo, se han sometido a esta vacuna y han referido aumento de temperatura y dolor de cabeza, aunque estos síntomas desaparecieron en 24 horas.