Nissan ha registrado formalmente un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para cerrar sus tres plantas de producción en Catalunya. La compañía ha presentado la documentación este martes por la tarde, tras la primera reunión del período de consultas entre la compañía y el comité de empresa.

Trabajadores y representantes de la empresa han sido citados a las diez de la mañana en la planta de la Zona Franca para dar inicio al mencionado período de consultas. La directiva de Nissan ha planteado "la posible continuidad" de ciertas actividades no relacionadas con la fabricación, como el Centro Técnico Europeo en Barcelona (NTCE Spain) y Compras.

Los sindicatos, por su parte, se han negado a negociar el cierre de las tres factorías y han asegurado que ellos sólo iban a hablar del “futuro” de la compañía y no de indemnizaciones. Además, han rechazado el inicio del período de consultas por la falta del informe del Comité Europeo.

"Han presentado documentación para iniciar el período de consultas, pero nosotros no reconocemos el inicio de este período porque el Comité Europeo aún no ha hecho el informe", cuenta Jordi Carmona, responsable automovilístico de UGT-FICA a nivel estatal.

A las puertas de la planta, unos 700 trabajadores se han concentrado para apoyar a sus compañeros. Durante las protestas, algunos de los manifestantes han lanzado petardos frente al edificio de la Zona Franca.

Unos 300 empleados se irán a Cantabria para movilizarse en la fábrica que la automovilística tiene en la región y en el centro de Santander, ante la sede del Gobierno de Cantabria. Las movilizaciones coincidirán con el inicio de la 'operación salida' de la primera quincena de julio.

Los representantes de los trabajadores creen que los miembros de la directiva como Frank Torres, que pilotará el cierre de las plantas, no se desplazarán a la Zona Franca e intervendrán por videoconferencia en el encuentro. 

Denuncian que Nissan ha "ahogado" las instalaciones

La reunión se produce un día después de la sesión conjunta de las comisiones de Trabajo y Empresa en el Parlament especial sobre la crisis de Nissan, a la que no asistieron los directivos, alegando que no querían interferir con el proceso de negociación con los trabajadores.

El comité de empresa de Barcelona sí asistió al Parlament y aprovechó su intervención para denunciar que la multinacional había "ahogado" las instalaciones, sacando modelos sin sustituirlos y permitiendo fugas de vehículos a fábricas de Renault, socio de Nissan. 

Todo ello ha dejado la Zona Franca con una producción de menos del 25% de su capacidad y sólo tres modelos: la furgoneta e-NV200 y las pick-up Nissan Navara y Renault Alaskan.

Chacón exige la memoria con las razones del cierre

La consellera de Empresa y Conocimiento de la Generalitat, Àngels Chacón, exigió el lunes a la multinacional que presente la memoria justificativa con las razones que le llevan a cerrar las plantas barcelonesas de Zona Franca, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca a finales de este año.

Chacón no descarta nacionalizar Nissan pero admite que no hay margen de presupuesto

Chacón tachó de "desleal" la actitud de la multinacional nipona, que ni siquiera ha respondido a la propuesta planteada por el Gobierno y la Generalitat de invertir 100 de los 400 millones que costaría fabricar un nuevo vehículo eléctrico en Catalunya, evitando así el cierre de las plantas.

La consellera reconoció que "es muy difícil que Nissan quiera seguir trabajando en Catalunya porque es una decisión global que ha tomado una multinacional que ha sufrido reestructuraciones en su dirección" durante una sesión telemática del foro Barcelona Tribuna.

Sin embargo, quiso remarcar que el sector de la automoción sigue siendo una apuesta de futuro para el Ejecutivo catalán que, dijo, se volcará en reforzarlo.

Cierre de Nissan

Los empleados de Nissan, indignados: "La decisión estaba tomada y ni nos han escuchado... ¡ahora a luchar!"

La cúpula de la multinacional confirmó el 28 de mayo el cierre de las tres fábricas catalanas. Nissan es la segunda planta automovilística del país y da trabajo a 3.000 personas. Además, según los sindicatos, pueden verse afectados 20.000 puestos de trabajo indirectos.

La marcha de Nissan pone fin a 40 años de historia de la empresa en Catalunya. Las instalaciones de la multinacional -Zona Franca, Montcada i Reixac, Sant Andreu, el centro de distribución en el puerto y la planta de recambios- representan el 1,3% del PIB de Cataluña y el 7% del producto industrial catalán.