Los Mossos d'Esquadra han denunciado penalmente a los administradores de dos empresas mayoristas de droguería por la distribución de preservativos falsificados. En este caso, se inició la investigación a mediados de mayo cuando el Servicio de Control Farmacéutico y Productos Sanitarios del Departament de Salut alertó a los Mossos que desde un supermercado de Barcelona se podrían estar vendiendo preservativos falsos.
Los investigadores descubrieron que se vendían estos productos falsificados o sin marcado CE en varios pequeños supermercados y encontraron los distribuidores en Sant Adrià de Besòs y Santa Perpètua de Mogoda. Desde el 2018, las dos empresas habían distribuido más de 15.000 cajas de preservativos falsificados y más de 41.000 sin marcado CE.
Los Mossos han recordado que los preservativos son un producto sanitario y la venta de estos falsificados puede ser constitutiva de un delito contra la salud pública y de otro contra la propiedad individual.
Un particular hizo saltar la alarma
El servicio de Salud había recibido el aviso de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios que un particular había denunciado que desde un supermercado de la Travesía de Les Corts se estaban vendiendo profilácticos de la marca Durex que podrían ser falsos, puesto que tenían características muy diferentes de las del producto original. En concreto, eran cajas de 12 unidades del modelo 'Durex Natural Confort', etiquetadas en castellano y portugués, correspondientes al lote 100221414, con fecha de caducidad 2024-05.
El 12 de mayo, Mossos e inspectores de Salut hicieron una inspección conjunta en el supermercado en concreto y localizaron e interveninieron varias cajas de este modelo y lote concreto. Además, detectaron que se estaba comercializando un segundo modelo que presuntamente también estaba falsificado.
Producto ilegal en Europa
Se intervinieron también cajas otros modelos de preservativos de la misma marca que no eran falsos pero no se podían comercializar en la Unión Europea puesto que no llevaban el perceptivo marcado CE, que es el que certifica que el producto cumple las garantías sanitarias para distribuirlos en Europa.
Los Mossos detectaron que el mismo tipo de profiláctico se estaría vendiendo en otros pequeños supermercados de Barcelona y que la mayoría de estos los habían adquirido a través de vendedores ambulantes y sin ningún tipo de garantía sanitaria ni factura legal. Esta compra irregular dificultó el trabajo de los investigadores para detectar y retirar el producto del circuito comercial.
Finalmente, los investigadores localizaron en Sant Adrià de Besòs el principal punto de distribución donde los vendedores ambulantes adquirían los preservativos para su posterior distribución a los establecimientos. Era un almacén de venta al por mayor de productos de droguería, el cual operaba en colaboración con otra empresa de características similares ubicada en Santa Perpètua de Mogoda (Vallès Occidental).
Los Mossos acabaron denunciando penalmente a los administradores de las dos empresas, dos hombres de 48 y 53 años y de nacionalidades española y paquistaní, como presuntos autores de un delito contra la salud pública y de otro contra la propiedad industrial.
Paralelamente, se intervinieron 700 cajas de preservativos falsos y 11.700 cajas de profilácticos sin marcado CE.
Ante estos hechos, los Mossos y Salut han recomendado a establecimientos y usuarios que, si detectan este tipo de productos con los lotes y fechas caducados indicados, no los utilicen y los retiren del circuito comercial, puesto que constituyen un riesgo para la salud. En concreto se trata de los productos 'Durex Natural Comfort' del lote 1000221414 con fecha de caducidad 2024-05 y 'Durex Dame Placero', del lote 1000603437 con fecha de caducidad 2024-05.
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