Casado pide al comisario de Justicia de la UE que mantenga "bajo control" la propuesta del Gobierno sobre el CGPJ

"Es inaceptable". Pablo Casado ya ha defendido su postura en Europa respecto a la idea que tiene el Gobierno para reformar el CGPJ. El presidente del PP ha mantenido este jueves una conversación con el comisario de Justicia europeo, Didier Reynders, en la que ha abordado este asunto. Tras la conversación, Casado ha remitido a Reynders una carta, firmada también por la portavoz popular en el Parlamento Europeo, Dolors Montserrat, en la que solicita que la Comisión Europea evalúe este proyecto de reforma y asegura que el PP tomará las medidas oportunas en el ámbito europeo para evitar que esta reforma prospere.

En la misiva, Casado asegura que el plan del Gobierno "es contrario a los principios del Estado de Derecho" y pide a Reynders que mantenga "bajo control" el plan del Ejecutivo de coalición. Los populares aseguran que están dispuestos a "reafirmar nuestro compromiso con el Estado de Derecho, la separación de poderes y la independencia judicial que están obligados a cumplir todos los países de la Unión Europea". A esto, la portavoz del PP en el Parlamento Europeo, Dolors Montserrat, lanzó un aviso: "Iremos hasta las últimas consecuencias".

Asimismo, como parte de estas iniciativas, el grupo del Partido Popular Europeo va a solicitar que este asunto sea estudiado por el Grupo de seguimiento sobre Estado de Derecho y Derechos fundamentales de la Comisión de Libertades Civiles y Justicia del Parlamento Europeo.

"Queremos dejar muy claro que iremos hasta las últimas consecuencias si el Gobierno no retira la reforma del CGPJ. Iremos hasta las instituciones europeas, los tribunales europeos, el Consejo de Europa y, por supuesto, la Justicia española. No se puede debilitar una gran nación como España y sus instituciones", ha proclamado Casado antes de participar en la cumbre del Partido Popular Europeo (PPE) que se celebra en Bruselas.

Este jueves, el Gobierno ha acusado al PP de mantener una actitud "antipatriota" y "desleal" a España al "incendiar" en Europa el debate sobre la renovación del CGPJ cuestionando la constitucionalidad de la reforma legal impulsada por el PSOE y Unidas Podemos para rebajar las mayorías para la elección de parte del órgano de gobierno de los jueces.