La Policía saca a más de 200 inmigrantes del campamento de Arguineguín y los deja en la calle: "No tenemos a dónde ir"

Cerca de 200 inmigrantes marroquíes se encontraban desde la tarde de este martes frente la Delegación del Gobierno en Las Palmas de Gran Canaria sin un lugar donde pernoctar ni al que ir, después de que la Policía desalojase el campamento de emergencia del muelle de Arguineguín.

"No tenemos a dónde ir", "no sabemos dónde pasaremos la noche", señalaron varios de ellos a Efe en la capital, mientras pedían el favor de que les permitieran llamar a sus familiares (algunos en España) para avisarles de que habían cogido una patera, están en Canarias y se encuentran bien.

Los inmigrantes que hablaron con Efe aseguraron que llevaban cinco días en Arguineguín, que solo habían comido una vez este martes y que ninguno había podido ducharse en los últimos quince días.

"Las personas que han abandonado hoy el muelle de Arguineguín no han sido derivadas como es habitual al sistema de acogida como solución puntual ante la alta ocupación de las instalaciones. Se están realizando los trámites para reubicarlos en el sistema de acogida", aseguró por su parte el Ministerio del Interior sobre lo ocurrido.

No hay recurso de acogida

En un comunicado emitido ante las preguntas de los informadores, el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska aseguró que se "ha dado la orden para que se realicen los trámites pertinentes para conocer los detalles que han dado lugar a esta situación".

La salida de 227 inmigrantes del muelle sin un recurso de acogida al que derivarlos cogió por sorpresa a las principales instituciones de Canarias, la primera de ellas, el Ayuntamiento de Mogán (al que pertenece la localidad de Arguineguín), cuyos responsables reaccionaron fletando un transporte para que todos los inmigrantes que quisieran se desplacen de Arguineguín a Las Palmas de Gran Canaria.

"Los han puesto en la calle sin ningún tipo de recursos, los han dejado fuera sin comida, bebida ni destino al que ir"

Al respecto, el concejal de Seguridad de Mogán, Mencey Navarro, argumentó que la mayoría son marroquíes y en Las Palmas de Gran Canaria tienen a su disposición el consulado de su país y la Delegación del Gobierno de España. Allí les llevaron las guaguas.

"Los han puesto en la calle sin ningún tipo de recursos, los han dejado fuera sin comida, bebida ni destino al que ir", denunció Navarro, en unas palabras luego secundó la alcaldesa de Mogán, Onalia Bueno, que hace unas semanas acudió a los juzgados a denunciar las condiciones "inhumanas" del campamento de Arguineguín.

Más de 2.000 personas acogidas en precario

Este martes por la tarde, Bueno se quejó en el mismo muelle de que nadie le daba una explicación en la Delegación del Gobierno, y denunció que había sido ella quien informó al presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, de la situación que se estaba produciendo.

El campamento de Arguineguín comenzó este martes con más de 2.000 personas acogidas en precario en sus instalaciones, mientras las embarcaciones de Salvamento Marítimo seguían trayendo nuevos rescatados al puerto (más de 500, hasta este martes por la tarde).

Ello agravó las condiciones de hacinamiento que vienen denunciando desde hace tiempo organizaciones como Human Right Watch, el propio Gobierno de Canarias, el Cabildo de Gran Canaria, el Ayuntamiento de Mogán o el juez que supervisa el Centro de Internamiento para Extranjeros de la isla, Arcadio Díaz Tejera.

Hasta 24 días durmiendo sobre el suelo

Tras lo ocurrido, Interior recordó que la legislación española no permite retener a los inmigrantes irregulares que no sean derivados a un centro de internamiento de extranjeros más allá de 72 horas, plazo en el que se les toma la filiación y, en el contexto actual de pandemia, se les hacen las pruebas de COVID-19.

Solo en caso haberse dictado sobre ellos una cuarentena o una restricción de movilidad por razones sanitarias se les podrían impedir abandonar el campamento de Arguineguín tras las 72 horas, añaden las mismas fuentes.

Sin embargo, tanto HRW como el juez Díaz Tejera denunciaron que cuentan con testimonios directos de personas que han pasado en el muelle hasta 24 días, durmiendo sobre el suelo.