Cuando Ana María Aldón tuvo que viajar de urgencia a su ciudad natal por el ictus que sufrió uno de sus hermanos, no se imaginaba que tendría que volver dos meses después por la salud de su madre.
Hace poco, mediante las redes sociales, la mujer de Ortega Cano reconoció estar sumida en una profunda tristeza debido a que las restricciones de seguridad la mantienen alejada de su gran apoyo, su familia.
Este lunes, Aldón estaba citada por en el juzgado de Plaza Castilla de Madrid por el enfrentamiento con el diseñador Emilio Salinas. Sin embargo, su mayor preocupación era el traslado a Cádiz.
Después de contestar varias preguntas sobre su intervención legal, la diseñadora ha desvelado que su progenitora, Celia, tiene que ser intervenida quirúrgicamente del ojo por tercera vez.
"Tengo que estar ahora a su lado. Me voy con ella", ha declarado la exparticipante de Supervivientes delante de las cámaras de Europa Press, por lo que el extorero se quedará a cargo del hijo que tienen en común.
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