Barcelona

Jéssica Albiach: "El Govern, cuando no ha gestionado bien, no ha asumido responsabilidades"

Bajo el lema El canvi que Catalunya mereix (El cambio de Cataluña se merece) la candidata de los comuns al 14-F, Jéssica Albiach, encara la última semana de campaña defendiendo a En Comú Podem como la opción que «garantice impulsar políticas de izquierdas y valientes» en Cataluña.

Se estrena como candidata a presidir la Generalitat en una campaña atípica por el coronavirus y con tensión en algunos actos electorales. 

Estamos viendo un clima de anti política que es preocupante y que está siendo muy aprovechado por la extrema derecha. Estamos haciendo bien el resto de formaciones políticas en esta campaña obviando a Vox en los debates. Frente al discurso del odio no hay que responderles para no levantarles y sí que contrarrestar con argumentos y con propuestas en positivo.

Afirma que le preocupa que haya electores que no acaben de entender la importancia de estos comicios para Cataluña. 

Creo que tenemos la obligación de explicarlo muy bien. Nos estamos jugando no solamente el presente sino también la próxima década. Llevamos muchos años sufriendo. Viendo además cómo los recortes que se hicieron hace 10 años nos han dejado unos servicios públicos absolutamente vulnerables. Se está demostrando que los recortes matan y que nuestro sistema público no estaba suficientemente fuerte para hacer frente a esta pandemia. Y frente a esto necesitamos el escudo social del Gobierno central pero también un escudo social del Govern catalán que echamos en falta.

«Si queremos que funcione la mesa del diálogo es importante la libertad de los presos del 1-O»

En Comú Podem se presenta como la alternativa al «desgobierno» actual de JxCat y ERC.

Las medidas que se están tomando desde el Gobierno central tenemos también que aplicarlas en Cataluña. Y, para mí, una de las principales es la política de los ERTE de Yolanda Díaz. Frente a la crisis de 2008, ahora ha caído tres veces más el PIB pero, en cambio, el paro ha aumentado la mitad. Y eso es gracias a las 750.000 personas que en Cataluña se han podido acoger a estos ERTE.

«A JxCat les sobramos todos los que no somos independentistas o a los que nos llaman ‘colonos’ porque venimos de fuera»

Se ha podido dar oxígeno a las familias y a las empresas.Por tanto, frente al desgobierno de JxCat y de ERC (incluso ellos mismos han reconocido que no se ha avanzado ni un milímetro durante esta legislatura) la única alternativa real que existe es un gobierno de izquierdas.

La candidata a presidir la Generalitat por En Comú Podem, Jéssica Albiach.
MIQUEL TAVERNA

En cambio, Pere Aragonès (ERC), les tiene en cuenta en su proyecto de Govern coral.

Lo que él está proponiendo es un gobierno Frankestein. Dice que quiere un gobierno con JxCat, con el PDeCATt, con la CUP, con nosotros…y yo siempre hago broma y digo que «aquí solo falta el apuntador y mi primo». Porque, al final, está hablando de meter a más actores en el gobierno para tapar el fracaso de su política actual, que estamos viendo que es la falta de gestión en favor de las mayorías sociales. 

Y yo aquí insisto en que el único voto útil, el único voto seguro que hay para tener un gobierno progresista que realmente resuelva la crisis social y económica es el voto a En Comú Podem. 

Y por tanto, frente a artefactos extraños que sabemos que no llevarían al país a ningún sitio. Lo hemos visto en esta legislatura y en las anteriores. Nosotros tenemos un plan que es sacar a Catalunya de la parálisis en la que está instalada.

«Incluso JxCat y ERC han reconocido que no han avanzado ni un milímetro durante esta legislatura»

¿Cúales son sus líneas rojas en cuanto a pactos postelectorales? 

Nosotras lo tenemos clarísimo: no pactaremos con la derecha. Ni con la derecha independentista de JxCat ni con la derecha españolista de Ciudadanos y del PP, porque tienen modelos que son absolutamente distintos. Y añado, a JxCat les sobramos la mitad del país, todos aquellos que no somos independentistas e incluso que nos han llamado colonos porque venimos de fuera.

Dicen que no estamos suficientemente cualificados cuando ellos son en parte los que han llevado a este país a una situación de bloqueo. Necesitamos una alianza de izquierdas que dé salidas progresistas a la crisis actual.

¿En un tripartito, harán el papel de bisagra para que ERC y PSC dejen atrás sus vetos mutuos? 

No hemos venido a ser bisagra sino a liderar ideológicamente el Govern. Y además creo que así lo demostramos. Somos una fuerza decisiva para que pueda haber políticas de izquierdas y un buen ejemplo es el Gobierno central. El socio prioritario del Ayuntamiento de Barcelona es ERC y también lo vemos en Madrid. ERC se ha unido al bloque progresista y esto es muy positivo.

«Estamos haciendo bien los partidos obviando a Vox en los debates»

¿Con ustedes en el Govern habrá más endeudamiento para salir de esta crisis? Estamos viendo que nos está costando muchísimo mover al PSOE para que dé ayudas directas. Tenemos 10.000 millones de euros que tendrían que estar a disposición. Las compañeras de En Comú Podem están empujando al partido socialista y yo quiero insistir a la ministra Calviño que no es el momento de cerrar el grifo sino de pensar que no puede caer ningún sector económico porque ya vimos lo caro que nos costó la austeridad de la anterior crisis.

¿Aparcan la propuesta de un nuevo referéndum en favor de la mesa del diálogo? El referéndum lo llevamos en el programa pero es el momento de no generar expectativas a las que sabemos que no les podemos poner un calendario. La mesa del diálogo es una oportunidad para llegar a un acuerdo que tiene que ser votado por las catalanas. Necesitamos una reforma del sistema de financiación que es injusto y está caducado. También un blindaje de la lengua y sobre todo cómo avanzamos en el autogobierno.

¿Y con los políticos presos en libertad? 

No tendrían que estar en prisión, no se tendría que haber llegado a judicializar este conflicto. Es un fracaso de la política. A nosotras nos pagan y nos votan para solucionar los problemas por vías políticas y, en este caso, si además queremos que funcione la mesa del diálogo, es muy importante su libertad.

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