La delegada del Gobierno en Andalucía, Sandra García, ha hecho este lunes un llamamiento a la calma a la ciudad de Linares (Jaén), a cuyos ciudadanos les ha pedido "calma y sensatez" tras los disturbios del sábado por la noche, unos hechos que considera "no representan para nada" lo que es la ciudad.

La brutal agresión en Linares comenzó con un codazo accidental a la salida de un bar: "¿Algún problema, gilipollas?"

Sandra García, a preguntas de los periodistas en una visita a la sede de la Fundación Andaltec en Martos (Jaén), se ha referido así a los disturbios que se produjeron en las protestas por la agresión de dos policías nacionales a un hombre y su hija de 14 años, que se saldaron con 14 detenidos y 20 policías heridos, así como participantes en los enfrentamientos de distinta consideración, entre ellos dos heridos con perdigones.

Respecto a estos dos policías que se encuentran ya en prisión, desde la madrugada del sábado, ha señalado que no representan "para nada" a la Policía Nacional.

Así fue el "ensañamiento" en la agresión de los dos policías en Linares: "Dijeron que no pararían hasta que sangrase"

"Somos todos conscientes de que la situación de Linares, como en muchos municipios, muchas provincias, es complicada", por el "estrés de la pandemia que nos está afectando a todos", por "el segundo estado de alarma, de la limitación de determinadas actividades, de la crisis económica y social", pero "bajo ningún concepto se pueden justificar ni movilizaciones ni altercados de este tipo", ha dicho.

"Me quedo con las notas de cariño que ayer llegaron a la Comisaría de Linares", ha asegurado Sandra García, "no con la ciudadanía de los altercados".