Un perro que estuvo desaparecido durante 43 días a temperaturas bajo cero fue milagrosamente rescatado vivo de un pozo a más de 32 kilómetros de su casa en Sand Lake, Michigan, Estados Unidos.

Según recoge el Mirror, el perro, llamado Milo y de raza springer spaniel, se quedó atrapado en un pozo bajo un silo de grano, y allí pudo sobrevivir pese a las bajísimas temperaturas registradas.

Los vecinos de la zona lo escucharon ladrar durante varios días y finalmente fueron a investigar. Al darse cuenta de que había un perro atrapado en el pozo, llamaron al servicio de control de animales del cercano refugio del condado de Kent, cuyos operarios pudieron sacarlo.

Los equipos de rescate expresaron su incredulidad ante el hecho de que Milo superara el hambre, la deshidratación y el frío intenso antes de que poder ser rescatado y llevado a un lugar seguro.

La organización animal Lost Paws descubrió que una familia había informado que un perro de aspecto similar había desaparecido de un pueblo cercano. Se pusieron en contacto con ellos y así fue como Milo se reunió con sus emocionados dueños.

La historia fue compartida en Facebook por el refugio, incluyendo una emocionante foto en la que se ve el momento del reencuentro entre Milo y sus dueños, que ya lo daban por perdido.