Una gran bola de fuego de color azul cruzó los cielos de la región de Alberta, en Canadá, esta semana, dejando imágenes espectaculares que fueron captadas por diversos ciudadanos con sus teléfonos móviles y por cámaras de seguridad.

Según la Universidad de Alberta, se trataría de la cola de un cometa que al entrar en la atmósfera terrestre, se prendió hasta acabar desintegrándose antes de impactar en la superficie de la Tierra.

Tal y como recoge Global News, este meteorito fue tan visible porque su entrada se produjo a 46 km de altura. Además, estiman que llevaba una velocidad aproximada de 220.000 km/h.

El cuerpo celeste, que también se pudo ver en el vecino estado de Saskatchewan, trazó su trayectoria final a unos 120 kilómetros al norte de la ciudad de Edmonton.

"Debido a que viajaba a tal velocidad, por eso produjo tanta fricción con la atmósfera, algo así como perforar una pared de ladrillos. Por eso fue tan brillante y fue visto por tanta gente", dijo Patrick Hill, becario postdoctoral en el Departamento de Ciencias de la Tierra y Atmosféricas de la Universidad de Alberta.

"Esta increíble velocidad y la órbita de la bola de fuego nos dicen que el objeto vino hacia nosotros desde el borde del sistema solar, diciéndonos que era un cometa, en lugar de una roca relativamente más lenta proveniente del cinturón de asteroides", dijo Chris Herd, curador de la Colección de Meteoritos de la Universidad de Alberta y profesor de la Facultad de Ciencias.