Errores que estás cometiendo al querer bajar de peso

El deseo de bajar peso y adelgazar es una de las motivaciones que tienen muchas personas para comenzar a hacer dieta y ejercicio. Sin embargo, son muchos los errores que se comenten en este sentido, sobre todo, cuando se espera conseguir resultados rápidamente.

El primero de los aspectos que hay que tener en cuenta es la salud. Ninguna dieta ni ejercicio que se haga para perder peso debe anteponerse a unos hábitos correctos y saludables.

Por ello, estos son algunos de los errores más frecuentes a la hora de intentar perder peso, tanto haciendo ejercicio como dieta.

Errores frecuentes a evitar para adelgazar

El primero de los factores que hay que tener en cuenta es que de poco sirve hacer mucho ejercicio si luego se come mal o viceversa. La combinación de ejercicio, de una vida activa y de una dieta sana y equilibrada son las claves para perder peso.

En cuanto a la comida, hay que bajar la ingesta calórica, lo que no significa que haya que dejar de comer. Así, lo que hay que hacer es reducir la ingesta calórica procedente de las grasas, cambiando las grasas saturadas por las insaturadas, tal y como indica la Organización Mundial de la Salud.

Además, es cierto que se recomienda hacer cinco comidas al día. Esto es clave para comer más veces en menor cantidad y evitar los picoteos entre horas. Obviamente, una persona que no desayuna ni almuerza, llegará a la hora de la comida con mucha hambre, lo que provoca que se coma rápido y con ansiedad, algo contraindicado para perder peso.

Así, lo mejor que se puede hacer es hacer las cinco comidas fundamentales, evitando comer entre horas y aumentando el consumo de frutas, verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos, que son perfectos para saciar la ansiedad por la comida.

Por otro lado, para no caer en errores a la hora de hacer dieta, hay que saber que, según la OMS, para evitar el aumento malsano de peso, las grasas no deben superar el 30% de la ingesta calórica total. Igual de importante es limitar el consumo de azúcar libre a menos del 10% de la ingesta calórica total y mantener el consumo de sal por debajo de 5 gramos diarios.

Respecto al ejercicio, muchas personas se obsesionan en el gimnasio con la parte de cardio, es decir, con la cinta de correr, la bicicleta estática o la elíptica. Es cierto que estos ejercicio ayudan a quemar calorías, pero hacer solo esto es un error que comete mucha gente. Las rutinas de ejercicio repetitivas son una mala elección, sobre todo, para las personas que no les gusta el deporte, ya que caen rápido en la desmotivación y en el abandono de la práctica deportiva.

Por otro lado, es un error pensar que con una hora de gimnasio al día es suficiente. Lo mejor para perder peso es conseguir tener una vida activa, por ejemplo, yendo andando o en bicicleta a trabajar o subiendo por las escaleras y no por el ascensor. De este modo, el gasto calórico será mayor y, sumado al ejercicio, se conseguirá quemar muchas más calorías a lo largo del día y compensar el aporte calórico de las comidas.