Reino Unido y su ministerio del Interior no pasa por su mejor momento. Este sábado se produjo en Londres una manifestación pacífica en memoria de Sarah Everard, la mujer cuyo presunto asesino es un agente de las fuerzas policiales, que terminó con unas imágenes poco agradables de los antidisturbios cargando duramente contra los manifestantes.

Tras lo sucedido la noche del sábado se pidió durante toda la jornada del domingo la dimisión de la máxima responsable de la Policía Metropolitana, Cressida Dick. Sin embargo, tras tener una larga conversación con Boris Johnson, lanzó un mensaje claro asegurando que no tenía pensado dejar el cargo y defendió a los agentes que se hallaron "en una posición muy difícil".

La Policía de Londres confirma que los restos humanos hallados en un bosque pertenecen a Sarah Everard

En un comunicado, Dick ha asegurado que "ninguno de nosotros hubiera querido ver las escenas que vimos ayer", y afirma entender "por qué tanta gente quería acudir a presentar sus respetos y dejar constancia de ello", señalando incluso que si la convocatoria de la protesta hubiera sido legal ella habría acudido. 

La protesta estaba compuesta por cientos de manifestantes, en su mayoría mujeres, que acudieron a solidarizarse con el crimen machista que se había producido. Se podían observar flores y velas por toda la plaza y, tras esconderse el sol, todas encendieron las luces de los móviles. En ese momento, la policía comenzó a desalojar la plaza, deteniendo y golpeando contra todos los que se resistían. 

El movimiento que organizó la protesta, ReclaimTheseSreets (Reclama estas calles), había hecho la convocatoria y más tarde la anuló cuando no obtuvo la autorización, pero finalmente se llevó a cabo y condenaron la actuación de los policías que "maltrataron físicamente a mujeres durante una vigilia contra la violencia masculina".

Por otro lado, la ministra del Interior, Priti Patel, cuya relación con la  jefa de la policía es conocida por sus tensiones, ha encargado que se realice un informe sobre los incidentes en Clapham Common, donde Sarah Everard fue vista con vida por última vez a principios de este mes.

Además, Johnson presidirá una reunión de la Unidad de Crimen y Justicia del Gobierno, a la que, además de Dick, asistirán Priti Patel, el ministro de Justicia, Robert Buckland, y el director de la Fiscalía general del Estado, Max Hill. "He hablado con la comisaria de la Policía Metropolitana y se ha comprometido a revisar cómo se gestionó la situación, y la ministra del Interior también ha encargado un informe" al cuerpo de Inspección de la Policía, afirmó el primer ministro.

"La muerte de Sarah Everard debe unirnos en la determinación de erradicar la violencia hacia las mujeres y hacer que todo el sistema de justicia funcione para protegerlas y defenderlas", concluyó el líder británico.