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El sindicato CSIF denuncia que todavía no se reconoce la covid como enfermedad profesional

Médicos, informando a familiares por teléfono en un hospital.
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El sindicato CSIF ha denunciado este lunes que, hasta la fecha, la Seguridad Social no ha reconocido ningún caso de enfermedad profesional por covid-19 pese a que el Consejo de Ministros aprobó en febrero un real decreto en el que se contemplaba este reconocimiento para el personal sanitario y sociosanitario.

En rueda de prensa con motivo del Día Mundial de la Seguridad y salud en el Trabajo, la secretaria nacional de prevención de riesgos laborales de la CSIF, Encarna Abascal, también ha revelado que sólo uno de cada diez contagios por covid ha sido declarado accidente de trabajo, y el argumento que da la Seguridad Social es que "falta justificación" de que el contagio haya tenido lugar en un entorno laboral.

Además, la responsable sindical se ha referido a los contagios en el transporte público y ha afirmado que, hasta el momento, "no se conoce ningún caso que se haya reconocido el covid como accidente in itinere".

Importante por las secuelas

Abascal ha insistido en la importancia de que se reconozcan las secuelas de la covid como enfermedad profesional "al cien por cien para todo lo que puedan sufrir a lo largo de su vida" y ha anunciado que la CSIF lanzará una campaña para promover las reclamaciones individuales y recurrirá a los tribunales las denegaciones.

Esta responsable ha dejado claro que la pandemia ha puesto de manifiesto las "carencias en los sistemas de gestión de prevención de las empresas" y ha tildado de "alarmante" la desprotección a los profesionales sanitarios.

Abascal ha informado de que, según las estadísticas del Ministerio de Trabajo correspondientes a 2020 y los dos primeros meses de 2021, se han registrado 12.325 accidentes de trabajo por covid entre el personal de la sanidad, 22 de ellos mortales. Sin embargo, Sanidad eleva la cifra de contagios en el mismo período de profesionales sanitarios a más de 125.691.

Esto supone, según la CSIF, que sólo se está reconociendo como accidente laboral por covid un 10% de los casos en el personal sanitario, el colectivo laboral con mayor cifra de contagios en España desde el inicio de la pandemia.

Según la misma estadística, las actividades económicas en las que se registran más accidentes de trabajo por covid son las residencias, con 165 casos y ningún fallecido.

Le sigue la administración pública y defensa (84 accidentes) y otras actividades (11 accidentes). En ambos casos las estadísticas no registran muertos.

Para la CSIF esta falta de reconocimiento en las estadísticas se explica por errores en la tramitación de los expedientes y "una clara falta de voluntad política por garantizar la protección de estos colectivos".

Desprotección y pérdida económica

Además, el sindicato ha denunciado "las trabas", por parte de los servicios de prevención de la Administración y empresas privadas, así como por parte de la Seguridad Social al reconocimiento de esta contingencia y sus correspondientes prestaciones.

El sindicato ha subrayado que esta circunstancia ha derivado "en caos en la gestión de las bajas laborales" ya que se contabilizan como bajas por enfermedad común en vez de accidente de trabajo, lo que genera desprotección y pérdida económica: "se dejan de percibir las guardias y la productividad, y se pierde la indemnización por secuelas".

Abascal también ha denunciado el desarrollo deficitario del teletrabajo "y la falta del derecho a la desconexión digital".

Testimonios de afectados

En la rueda de prensa han ofrecido sus testimonios el enfermero del hospital Gregorio Marañón Víctor Aparicio y el Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE) del hospital La Princesa, Darío Carrasquillas.

Carrasquillas, que contrajo la covid en la primera ola y estuvo ingresado en su propio centro por neumonía bilateral, sufre secuelas (paresterias, calambre, dolor y fatiga) pero nadie le ha reconocido la enfermedad profesional, ni le ha hecho ningún tipo de seguimiento por lo que la terapia que realiza corre de su propio bolsillo.

Por su parte, el enfermero Víctor Aparicio ha denunciado el impacto psicológico y de salud mental que la enfermedad está provocando.

"Se nos hizo creer que estábamos en guerra pero en ningún momento vimos bombas o disparos. Nos han tratado como a militares y ha sido una manera terrible de deshumanizarnos", ha señalado este enfermero, que ha insistido en el aumento de consumo de estupefacientes, las recaídas en depresión e incluso las tentativas de suicidio.

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