Multa de 330 euros a Marisol Yagüe por una bofetada a un menor que la llamó "ladrona"

Marisol Yagüe, el día que accedió a la alcaldía de Marbella en marzo de 2006.
Marisol Yagüe, el día que accedió a la alcaldía de Marbella en marzo de 2006.
Rafael Díaz / EFE
Marisol Yagüe, el día que accedió a la alcaldía de Marbella en marzo de 2006.

El Juzgado de Instrucción número 5 de Marbella (Málaga) ha condenado a la ex alcaldesa marbellí, Marisol Yagüe , imputada en el caso Malaya, al pago de una multa de 180 euros e indemnización de 150 euros por una falta de lesiones, al considerarse probado que pegó una bofetada a un menor después de que éste le llamara "ladrona".

Los hechos sucedieron el pasado 2 de junio sobre las 13.50 h, cuando Yagüe pasaba con su coche por un colegio de Marbella. Según la sentencia, un menor de 15 años que se encontraba en la puerta con otros amigos le dijo "alcaldesa, ladrona".

En ese momento, la ex regidora, "ofuscada por el escarnio", paró el coche y se dirigió inmediatamente hacia el grupo y preguntó quién lo había dicho. El menor de edad, según la resolución, reconoció que había sido él y añadió que "cuando quisiera le demostraba que era una ladrona".

En ese momento, Yagüe le reprochó la forma de actuar y le dijo que ladrona "lo será tu padre o tu madre, propinándole una bofetada que sanó tras cinco días, según se declara probado, en la sentencia, dictada por el juez que instruye el caso Malaya, Oscar Pérez.

"Con el propósito de insultarla"

Así, en la resolución se da por probado el "escarnio" del menor, "que se burló de la ex alcaldesa con propósito de insultarla". El juez considera que hubo contradicción en el muchacho, que en la denuncia dijo que pronunció esa palabra "en el contexto de un juego" y en el juicio dijo que se refería a una compañera.

Asimismo, el magistrado entiende que "una persona no se baja de un vehículo sin más si no es por una razón", por lo que concluye que la acción de la denunciada "estuvo precedida del escarnio", lo que influye a la hora de fijar la pena, ya que el fiscal pidió un mes de multa, pero con una cuota de 10 euros al día y la acusación particular elevó a dos meses de multa, con cuota de 30 euros.

Respecto a la bofetada, la propia denunciada reconoce que hubo un contacto físico con el denunciante, aunque estaba "tremendamente alterada por lo ocurrido". También el tutor del menor declaró que Yagüe le dijo que efectivamente le había pegado y, además, existe un parte médico.

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