La historia de 'Manoliño': el delfín amigo de los bañistas gallegos al que han pedido no acercarse

A Roger, la última campaña de la navaja no se le va a olvidar en la vida. Todo empezó en el mes de enero en la ría de Muros y Noia donde él y sus compañeros de faena salen cada día a recoger navajas. En sus inmersiones veían como un delfín merodeaba por la zona. Cuenta Roger que se acercaba al barco y eso les hacía ilusión. Al tiempo que les daba algo de respeto, poco acostumbrados a estar cerca de un animal de semejante tamaño.
Imagen del delfín bautizado como 'Manoliño' y el mariscador Roger. 
A Roger, la última campaña de la navaja no se le va a olvidar en la vida. Todo empezó en el mes de enero en la ría de Muros y Noia donde él y sus compañeros de faena salen cada día a recoger navajas. En sus inmersiones veían como un delfín merodeaba por la zona. Cuenta Roger que se acercaba al barco y eso les hacía ilusión. Al tiempo que les daba algo de respeto, poco acostumbrados a estar cerca de un animal de semejante tamaño.
Imagen del delfín bautizado como 'Manoliño' y el mariscador Roger.

El delfín apodado como 'Manoliño' se ha convertido en un atractivo para los bañistas de las costas gallegas, concretamente los de la ría de Muros y Noia. Sin embargo, los expertos en cetáceos ya han lanzado varios mensajes de alarma para que las personas dejen de interactuar con este animal, gregario por naturaleza, pero en peligro por sus nuevas 'amistades humanas'.

Todo empezó hace aproximadamente un año, cuando un mariscador de la zona llamado Roger comenzó una amistad con el delfín, que, tras ser repudiado por su manada, se acercó a él cuando estaba recogiendo navajas junto a sus compañeros.

Aunque estos prefirieron mantener las distancias con este cetáceo de unos 150 kilos de peso, Roger sí trató con el animal, que adoptó la rutina de acercarse al grupo de trabajadores. Fue Roger, de hecho, quien bautizó a su nuevo 'amigo' como 'Manoliño'.

Un verano más tarde y con la reciente relajación de las restricciones por la pandemia de coronavirus en Galicia, la población se ha vuelto a echar al agua y ha buscado recuperar la relación con uno de los atractivos de la ría. Sin embargo, los expertos han pedido que detengan estos comportamientos y acercamientos al cetáceo y ha instado a la ciudadanía a salir del agua cuando el animal se aproxime a ellos.

¿La razón? Por seguridad de ambos. Por un lado, estos animales pueden protagonizar incidentes graves, como el de un mariscador submarinista al que mordió y arrastró de golpe hasta la superficie, tal y como recoge El País. Por otro lado, y tal y como advierten los expertos, este delfín podría perder el miedo a los humanos, lo cual es clave para su supervivencia

Por ello, la consigna de los biólogos es ignorar sus llamadas de atención, tanto para que vayan menguando sus interacciones con humanos -y deje a los mariscadores trabajar tranquilos- como para evitar posibles arrebatos o accidentes.

Desde la ong gallega la Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños (Cemma) señalan que en caso de encontrarse con 'Manoliño' -también conocido por 'Confi'-, hay que "ignorarlo y salir del agua lo antes posible. Nunca acercarse ni intentar tocarlo. Adoptar actitud de indiferencia y salir del agua. Observarlo siempre desde la distancia".

20minutos

20minutos.es líder en los diarios más leídos en internet. Consulta las últimas noticias en el diario gratuito de referencia en España.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento