Telecinco emitió este viernes una nueva entrega del Deluxe. En el programa, en primer lugar se entrevistó a Amador Mohedano, el hermano de Rocío Jurado. Este volvió a posicionarse junto a Rocío Flores y David Flores, y negó muchas de las informaciones ofrecidas por su sobrina, Rocío Carrasco, en Rocío, contar la verdad para seguir viva.

Lara Sajén se rompe al conocer el asesinato de Samuel en 'Supervivientes': "Queda más camino del que pensaba"

Tras esto, Belén Esteban cambió su silla de colaboradora por la de entrevistada para hablar brevemente sobre cómo estaba siendo su experiencia como empresaria de alimentación y para contar algunas novedades al respecto que se conocerán a finales de año.

Pero la parte más emotiva de la noche llegó de la mano de Lara Sajén. La recién llegada de Honduras tras ser uno de los pesos pesados de Supervivientes 2021 ofreció una de sus entrevistas más personales hasta la fecha y en ella volvió a dejar claro que, pese a su fortaleza, positividad y sentido del humor, la artista se ha enfrentado a situaciones durísimas que nadie debería vivir.

Una de las historias más duras que recordó Sajén tuvo relación con dos policías. Según contó, cuando la argentina llegó a Madrid se sintió profundamente libre en el barrio de Chueca. "Estaba muy loca, una vez llegué a salir en Nochevieja con una chaqueta cortita de piel y un bikini dorado, pedí un taxi para regresar a casa y en ningún momento sentí miedo", ilustró.

Sin embargo, y aunque esa era la tónica general "hasta que llegaba a Gran Vía y escuchaba ciertos comentarios", la artista se enfrentó junto a su amiga a un desagradable episodio que aunó abusos de poder, machismo y transfobia.

"Llamamos a la policía para que nos protegieran, pero ocurrió exactamente lo contrario: me dieron una paliza". Cuando le preguntaron a la también exconcursante de Maestros de la costura por lo que podría haber motivado dicha agresión, Sajén explicó que, simplemente, se topó con "dos gilipollas". 

Tras la paliza, Lara y su amiga siguieron sufriendo vejaciones por parte de los agentes: en primer lugar, estos hicieron que su amiga, que también era transexual y no se había operado los genitales, se quitara su ropa interior y moviera "su miembro". Además, las separaron en el calabozo al considerar que su amiga, al tener pene, no debía pasar el tiempo junto al resto de mujeres.