El final de las restricciones para moverse dentro de España que decayeron con el segundo estado de alarma y la apertura de España al turismo internacional, hace ya un mes, han permitido que los aeropuertos vayan recobrando poco a poco su actividad. Sin embargo, bien entrado el verano, en los vestíbulos de llegadas y salidas sigue faltando gente, personas que no viajan pero que van a despedir o a recibir a los que se van o llegan. Su acceso se prohibió en julio de 2020 y un año después de momento en el Gobierno no hay planes para cambiarlo. Familiares y amigos seguirán teniendo que decir adiós desde el otro lado de la puerta de la terminales.

El decreto ley que convalidó el Congreso esta semana para permitir ir sin mascarillas al aire libre cuando se pueda mantener una distancia de 1,5 metros incluye una disposición que faculta al Gobierno, a propuesta del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y el de Sanidad a modificar la ley vigente para permitir el acceso a los aeropuertos de gestión estatal de personas diferentes a los viajeros.

Es dentro de esta norma donde se ubica la posibilidad de que el Gobierno derogue otra de las restricciones que se impusieron el año pasado, una vez que el país salió del primer estado de alarma, en referencia a quiénes puede acceder a los aeropuertos, aunque de momento no hay previstas novedades para cambiarlo.

Vidas más llevaderas

El miércoles, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, defendió en el Congreso la convalidación del decreto que flexibiliza el uso de la mascarilla, que recibió las criticas por "irresponsable" de partidos como el PP o el PNV y estuvo precedido por la petición de algunas comunidades para reimplantar la obligatoriedad en cualquier circunstancia. Pero ella aseguró que eran medidas "prudentes", encaminadas a "ir haciendo de nuestra vidas un poco mas llevaderas". 

A tal fin, otros de los elementos que, según esta ley, deben desarrollarse es "una modulación de la regulación del acceso a las terminales aeroportuarias de interés general". Darias no dio una fecha pero habló de "una modulación de las restricciones si ello fuera preciso".

Pero momento algo así no está en el horizonte del Ejecutivo. Así lo indicaron hace unas semanas fuentes del Ministerio de Transportes, siendo José Luis Ábalos todavía ministro, y así lo corroboran ahora, bajo el mandato de la nueva ministra, Raquel Sánchez. El Ministerio de Sanidad, por su parte, no ha respondido a la pregunta de si está previsto que en breve se pueda permitir el acceso a personas distintas a los viajeros que van o llegan.

De este modo, aunque hay una ley que lo permitiría, por el momento el Ejecutivo no tiene planes para modificar una ley de julio de 2020 que solo permite el acceso a los aeropuertos a pasajeros "provistos de un billete o tarjeta de embarque válidos, en las 6 horas anteriores a la salida prevista del vuelo", a los empleados del mismo y de empresas que presten servicios dentro o de compañías aéreas y al personal de fuerzas y cuerpos de seguridad, así como aduaneros, sanitarios, correos y seguridad exterior e interior.

Según recuerdan fuentes de AENA, estas restricciones se mantienen a día de hoy ellos, con la única excepción que también prevé la ley de permitirse el acceso a personas que acompañen a menores de edad o a personas con necesidades especiales.