El anuncio de la ruptura de Sara Carbonero con Iker Casillas tras once años de matrimonio sorprendía a todos hace unos meses. Desde entonces, la periodista ha rehecho su vida en la capital y ha comenzado una nueva relación.
Carbonero ha cerrado una etapa de casi una década en Lisboa, y ahora comienza una vida diferente de vuelta a Madrid. Nuevos compromisos profesionales, sociales, nueva residencia y nuevo interés amoroso.
Aunque los rumores de la relación con Kiki Morente aún no se han confirmado, parece que el cambio de pareja ha aportado "calma" a la vida de la periodista. Así, lo compartía ella en su cuenta de Instagram.
Cualquiera que siga los pasos de Sara Carbonero en redes sociales, sabrá que la influencer es propensa a compartir con sus 3 millones de seguidores poemas, letras de canciones o cualquier tipo de literatura que le inspire y refleje su estado de ánimo actual.
Con este "mantra para un sábado" del Dalai Lama, Carbonero reflexionaba sobre la "vida lenta": "Se llama calma y me costó muchas tormentas", comienza el poema compartido.
"Se llama calma cuando se aprende bien a amar", se leía en otro de los versos. "El inconformismo se desvanece para abrir corazón y alma entregándose enteros a quien quiera recibir y dar", sigue.
"Se llama calma, la disfruto, la respeto y no la quiero soltar..." concluye esta pequeña pieza que demuestra que Sara ha pasado por momentos muy duros en los últimos años y, a pesar del torbellino de los últimos meses, por fin ha encontrado felicidad.
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